9 de octubre de 2024 (EIRNS) — La Casa Blanca anunció ayer por la tarde que el Presidente Joe Biden no asistirá a la reunión del Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania en Alemania y no viajará a Alemania para las reuniones del 10 al 12 de octubre. El comunicado en sí apenas es más largo que su dirección de Internet: “Dada la trayectoria prevista y la fuerza del huracán Milton, el Presidente Biden pospone su próximo viaje a Alemania y Angola para supervisar los preparativos y la respuesta al huracán Milton, además de la respuesta en marcha a los efectos del huracán Helene en todo el sureste”. 

El Presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, decepcionado por no haber conseguido que Biden firmara abiertamente el envío de misiles de largo alcance a Rusia, tanto el 13 de septiembre, cuando fue presionado por el Primer ministro británico Keir Starmer, como el 26 de septiembre, cuando él mismo suplicó a Biden, había estado apostando todo a una sesión con Biden el 12 de octubre en Alemania. Iba a hacer el lanzamiento de su vida para su tan cacareado “Plan de la Victoria”, pero puede que en este tercer intento haya fracasado. 

Ayer a primera hora del día, el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, había recalcado la seria amenaza de Moscú de una posible respuesta nuclear a la temeraria opción del “ataque profundo” impulsada por el partido de la guerra de Occidente, concretamente en referencia a la próxima reunión de Ramstein. En el Canal Uno de la televisión rusa, Lavrov explicó que Moscú pondría en marcha el “plan de contingencia” esbozado por el Presidente Vladímir Putin en caso de que Ucrania recibiera permiso para utilizar misiles de largo alcance suministrados por Occidente para atacar en profundidad dentro de Rusia. Como explicó RT, Lavrov se refería a la “próxima reunión de los donantes extranjeros de armas de Kiev, que el líder ucraniano Volodímir Zelenski ha estado promocionando como ‘histórica’”. 

Lavrov dejó claro que al gobierno ruso no le impresionan las diversas declaraciones, formulaciones y equívocos sobre la política de “ataque profundo” de Occidente. Dijo que Moscú no sigue las declaraciones sobre el tema, pues ya tiene preparada una respuesta: “En cuanto se tome esta decisión, si es que se toma, lo sabremos, y la contingencia mencionada por Vladimir Putin ya estará en marcha”. 

Por lo demás, Zelenski tuvo un día duro, ya que su oficina anunció la cancelación de la llamada “Cumbre de la Paz”, prevista para noviembre, sin anunciar una fecha futura; y recibió más malas noticias sobre los avances rusos a lo largo de sus 1.000 millas de frente.