12 de octubre de 2024 (EIRNS) — Un tanque Merkava de las Fuerzas de Defensa de Israel disparó hacia una torre de observación en el cuartel general de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en Líbano (FPNUL) en Naqoura el 10 de octubre, e “impactó directamente” y derribó a los dos cascos azules que estaban de vigía en ese momento. La declaración de la FPNUL no deja lugar a dudas: Los disparos se hicieron contra ese objetivo. No hubo ningún error de puntería, ningún accidente; fue un ataque intencionado, informó el diario romano Il Manifesto. 

Luego, las FDI alcanzaron la base italiana 1-31 después de que un dron la sobrevolara varias veces, el cual dañó la entrada del búnker donde se refugiaban los soldados italianos. El ataque dañó vehículos, sistemas de comunicación y cámaras de vigilancia. Las FDI también alcanzaron la base 1-32A, dañando el sistema de iluminación y una estación de transmisión. El contingente italiano, con 1.256 soldados, es el más numeroso de la FPNUL. 

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Italia convocó en Roma al embajador israelí Jonathan Peled. El ministro de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, declaró que el gobierno de Netanyahu le había dado garantías en los últimos días de que las Fuerzas de Defensa de Israel no atacarían a la fuerza de la FPNUL. 

China “condenó enérgicamente” a Israel por el ataque y está “sumamente preocupada” por un ataque contra las fuerzas de la FPNUL. La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Mao Ning, respondió hoy a una pregunta de la agencia Anadolu de Turquía: “Cualquier ataque deliberado contra las fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU es una grave violación al derecho internacional humanitario y de la Resolución 1701 del CSNU. Es absolutamente inaceptable y debe detenerse de inmediato. Pedimos que se investigue el incidente, que se haga lo posible para que las personas implicadas rindan cuentas y que se tomen medidas para evitar que se repita... China insta a las partes implicadas, Israel en particular, a tomar medidas inmediatas para rebajar las tensiones, garantizar la seguridad del personal de mantenimiento de la paz de la ONU y evitar que el conflicto siga expandiéndose o que se salga de control”.