21 de noviembre de 2024 (EIRNS) — El Presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ayer en Brasilia al Presidente de China, Xi Jinping, con trompetas, honores militares y niños brasileños cantando canciones chinas, en una visita de Estado para celebrar el 50 aniversario de las relaciones entre los dos países. Los beneficios cosechados por los dos países en los últimos 50 años han beneficiado al mundo, afirmó Lula da Silva, y ahora estamos haciendo planes para los próximos 50 años.

En declaraciones a la prensa al término de sus reuniones, los mandatarios anunciaron que Brasil y China han decidido elevar su actual "asociación estratégica global" a la calidad de "Comunidad para un futuro compartido por un mundo más justo y sostenible". Como grandes países en desarrollo, responsables, trabajarán juntos para luchar contra el hambre y la pobreza y superar los conflictos geopolíticos con el fin de restablecer la paz necesaria para el desarrollo del Sur Global y el establecimiento de un orden mundial más justo. Ambos destacaron los "Seis Entendimientos Comunes" para una resolución pacífica del conflicto Ucrania-Rusia, que Brasil y China dieron a conocer el 23 de mayo del 2024, como ejemplo de sus esfuerzos conjuntos. En palabras de Lula, "lo que China y Brasil hacen juntos repercute en todo el mundo... En un mundo asolado por los conflictos armados y las tensiones geopolíticas, China y Brasil anteponen la paz, la diplomacia y el diálogo".

Xi calificó su reunión de "muy productiva", y su relación actual como la mejor de la historia. Nuestras relaciones son un ejemplo de cómo los grandes países en desarrollo pueden trabajar juntos, codo a codo, en los tiempos actuales, que no son tranquilos, y en los que no hay respuestas sencillas, dijo. Lula destacó que esta visita de Estado "renueva el espíritu pionero" de su relación de 50 años, basada en los "intereses compartidos y las visiones cercanas del mundo" entre sus naciones. Manifestó estar especialmente feliz de que China fuera la primera nación en apoyar de manera firme, su propuesta por una Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza. (La iniciativa de Xi para aliviar la pobreza en China ha sacado de la pobreza a más de 800 millones de personas).

Los dos Presidentes hablaron de su acuerdo para "establecer sinergías" entre la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China y los programas de desarrollo de Brasil, en particular las Rutas de Integración Sudamericana propuestas por Brasil, así como los Planes Nacionales de Nueva Industria, Aceleración del Crecimiento y Transformación Ecológica de Brasil. El 20 de noviembre se firmaron 37 acuerdos que abarcan desde la coordinación del trabajo de sus agencias internacionales de desarrollo en terceros países hasta la cooperación en tecnologías nucleares para su uso en medicina y farmacia, pasando por el desarrollo de la inteligencia artificial para utilizarla en las granjas agrícolas familiares, y otros.

"Para hacer más concretas estas sinergías", dijo Lula, acordaron crear dos grupos de trabajo, uno sobre "Cooperación Financiera" y otro sobre "Desarrollo Productivo y Sostenible", que deberán "presentar proyectos prioritarios en el plazo de dos meses".

En un breve y entusiasta video tras sus conversaciones, Lula les dijo a los brasileños que la reunión había sido un "éxito extraordinario". Brasil tiene amistad con China desde hace 50 años, y la hemos renovado por otros 50 más, explicó. Hemos formado asociaciones para luchar contra el hambre, producir IA (inteligencia artificial) y construir infraestructura. Estos acuerdos a largo plazo serán buenos para Brasil y para China.