1º de febrero de 2025 (EIRNS) — El embajador extraordinario de Rusia, Grigory Mashkov, publicó un artículo el 30 de enero en la revista International Affairs del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, en el que señala que Rusia podría levantar las restricciones cuantitativas y cualitativas de su programa de armas nucleares, en respuesta a los planes de Estados Unidos de desarrollar un sistema de defensa antimisiles y a su política declarada de “infligir daños estratégicos a Rusia”.

La declaración política de Mashkov se produce pocos días después de que el Presidente Donald Trump emitiera el 27 de enero una Orden Ejecutiva para el desarrollo y despliegue de un sistema de defensa antimisiles láser terrestre y espacial, y apenas unos meses después de la revisión de Rusia de su doctrina nuclear general. Mashkov, que también es miembro del Consejo Científico del Consejo de Seguridad de la Federación Rusa, escribió:

“En las realidades emergentes, ya no es posible hablar de estabilidad estratégica en su contexto bilateral clásico, pues de lo contrario podríamos sumirnos en otra ilusión. Han aparecido muchos actores en la arena internacional que influyen en la alineación global de fuerzas de misiles. No se descarta que en las actuales condiciones de enfrentamiento con Occidente, con su política de infligir daños estratégicos a Rusia, nos enfrentemos a la necesidad de abandonar las restricciones sobre los arsenales nucleares y de misiles en favor de su aumento cuantitativo y cualitativo”.

Agregó que el sistema global de defensa antimisiles propuesto por Estados Unidos “pone fin a las perspectivas de reducción de armas estratégicas ofensivas y preservación de la estabilidad estratégica en los términos anteriores”.

“La carrera armamentista de misiles ya está en pleno apogeo. También lo está la modernización a gran escala de los arsenales nucleares y de los vectores de ADM [armas de destrucción masiva]. Está cobrando impulso la militarización del espacio, que, en un futuro próximo, es probable que se convierta en otro escenario de confrontación militar. Las nuevas tecnologías (inteligencia artificial, computadoras cuánticas, etc.), que pueden multiplicar el potencial del enemigo en áreas estratégicas, incluida la defensa antimisiles, están empezando a desempeñar un papel en este sentido”, añadió Mashkov.

“Tendremos que revisar de nuevo todos nuestros compromisos en el ámbito del refuerzo de la transparencia y las medidas de confianza, y suspender las discusiones sobre riesgos y amenazas nucleares, que se están convirtiendo en palabras huevas en el contexto de los crecientes esfuerzos de Occidente por socavar las fuerzas de disuasión nuclear estratégicas y no estratégicas. En general, otras áreas del control de armamentos, el desarme y la no proliferación deberían estar mejor alineadas con las ambiciones de dominio global de Estados Unidos. Es difícil juzgar si nuestra política de cooperación con los estadounidenses sólo en las áreas que les interesan es razonable, en todo caso”, concluyó.