3 de febrero de 2025 (EIRNS) — La Casa Blanca publicó el 1º de febrero una ficha informativa sobre la imposición de aranceles a China, Canadá y México, en la que afirma que "las organizaciones mexicanas de narcotraficantes tienen una alianza intolerable con el gobierno de México. El gobierno de México ha proporcionado refugio seguro para que los cárteles se dediquen a la fabricación y el transporte de narcóticos peligrosos, que en conjunto han provocado la muerte por sobredosis de cientos de miles de víctimas estadounidenses. Esta alianza pone en peligro la seguridad nacional de Estados Unidos y debemos erradicar la influencia de estos peligrosos cárteles".

La Presidenta Claudia Sheinbaum respondió de manera tajante en su cuenta X:

"Rechazamos categóricamente la calumnia que hace la Casa Blanca al Gobierno de México de tener alianzas con organizaciones criminales, así como cualquier intención injerencista en nuestro territorio". Contraatacó señalando el bien documentado tráfico de armas a México desde arsenales controlados por el gobierno de Estados Unidos: "Si en algún lugar existe tal alianza es en las armerías de Estados Unidos que venden armas de alto poder a estos grupos criminales, como lo demostró el propio Departamento de Justicia de Estados Unidos en enero de este año".

Sheinbaum también respondió al ataque preguntando qué ha hecho Estados Unidos con respecto al "lavado de dinero que se genera por esta actividad ilegal que tanto daño ha hecho a su población". Reiteró que "México no quiere confrontación. Partimos de la colaboración entre países vecinos... si Estados Unidos quiere combatir a los grupos delictivos que trafican droga y generan violencia, debemos trabajar conjuntamente de forma integral", recalcó. “Pero siempre bajo los principios de responsabilidad compartida, confianza mutua, colaboración y sobre todo, respeto a la soberanía, que no es negociable. Coordinación sí; subordinación, no".

La pregunta incisiva de Sheinbaum sobre la falta de respuesta de Estados Unidos al blanqueo de dinero procedente de la droga en sus propios bancos, dio justo en el clavo. Aunque es innegable que los grandes cárteles de la droga han ejercido una enorme influencia en México (al igual que en otros países del sector en desarrollo víctimas del narcotráfico), el hecho flagrante de la cuestión es que esos cárteles son poco más que los soldados rasos del aparato internacional de lavado de dinero de la droga de $1 billón de dólares al año, que está centralizado en los bancos más prestigiosos de Wall Street y de la City de Londres, tal y como demostró la Executive Intelligence Review (EIR) hace décadas en su popular libro Narcotráfico S.A..

Si Trump asumiera enfrentarse a este aparato, y clausurara y encarcelara a los banqueros lavadores de dinero, encontraría un agradecido apoyo y cooperación en todo el Sur Global. ¿Quizás los aranceles de Trump están dirigidos al lugar equivocado? ¿Quizás deberían elevarse al 100% e imponerse en su lugar a los banqueros de Wall Street que lavan el dinero del narcotráfico?