3 de febrero de 2025 (EIRNS) — Las naciones árabes más prominentes emitieron el 1º de febrero una declaración conjunta en la que rechazan enérgicamente el llamado del Presidente Donald Trump a reubicar a millones de palestinos de Gaza en países vecinos. "Simplemente limpien todo eso", había declarado Trump, diciendo que "se comprometería con algunas de las naciones árabes y construiría viviendas [para los 2,3 millones de personas que viven en Gaza] en un lugar diferente donde, para variar, creo que tal vez podrían vivir en paz".

Luego de la reunión en El Cairo el 1º de febrero de altos diplomáticos de Egipto, Jordania, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, la Autoridad Palestina y el presidente en turno de la Liga Árabe, Ahmed Aboul Gheit, emitieron una declaración conjunta en la que "rechazan enérgicamente... el desalojo de palestinos mediante la expulsión directa o la migración forzada", y advierten que tales planes "amenazan la estabilidad de la región, se corre el riesgo de ampliar el conflicto y vulneran las perspectivas de paz y coexistencia entre sus pueblos". Señalan que esperan trabajar con Trump para "lograr una paz justa y completa en Oriente Medio, basada en la solución de dos Estados" entre Israel y Palestina.

La semana pasada, el Presidente de Egipto, Abdel Fattah el-Sisi, rechazó la sugerencia de Trump, y declaró que el traslado de palestinos "Jamás puede tolerarse ni permitirse... La solución a esta cuestión es la solución de dos Estados. Es el establecimiento de un Estado palestino", subrayó. "La solución no es expulsar al pueblo palestino de su territorio. No".

El ministro de Asuntos Exteriores de Jordania, Ayman Safadi, también declaró que la oposición de su país a la idea de Trump "es firme e inquebrantable". Jordania ya alberga a más de 2 millones de palestinos, quienes tienen garantizado el "derecho de retorno" a Palestina según la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948, los Convenios de Ginebra de 1949 y la Resolución 3236 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que "reafirma también el derecho inalienable de los palestinos a regresar a sus hogares y propiedades de los que han sido desplazados y desarraigados, y pide su regreso".