El presidente de El Salvador ofrece “subcontratar” parte del sistema penitenciario de EU
5 de febrero de 2025 (EIRNS) — En una reunión de tres horas el 3 de febrero con el secretario de Estado de EU, Marco Rubio, el Presidente de El Salvador Nayib Bukele ofreció lo que Rubio llamó “el acuerdo migratorio más extraordinario y sin precedentes en cualquier parte del mundo”. Bukele accedió a “aceptar para la deportación a cualquier extranjero ilegal en Estados Unidos que sea un criminal, o de cualquier nacionalidad, ya sea de la MS-13 o del Tren de Aragua (venezolano) y alojarlos en sus cárceles”, según informó ABC News. Aunque Rubio explicó que la oferta de Bukele también incluía a “ciudadanos estadounidenses y residentes legales”, funcionarios estadounidenses anónimos respondieron inmediatamente que Estados Unidos no tiene planes de deportar a ciudadanos estadounidenses, lo que está prohibido por la ley y se arriesgaría a importantes desafíos legales si se llevara a cabo.
Según la agencia Associated Press, Rubio admitió: “Hay legalidades obvias implicadas. Tenemos una Constitución, pero es una oferta muy generosa. Obviamente, el gobierno tendrá que tomar una decisión”. Rubio había informado de los detalles del plan al presidente Donald Trump, antes de hacer un anuncio público. A Elon Musk, director del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), le pareció una “gran idea” la oferta de Bukele.
En un mensaje publicado ayer en su cuenta X, Bukele informó: “Hemos ofrecido a los Estados Unidos de América la oportunidad de externalizar parte de su sistema penitenciario. Estamos dispuestos a acoger en nuestra megaprisión (CECOT) sólo a delincuentes convictos (incluidos ciudadanos estadounidenses condenados) a cambio de una cuota. El canon sería relativamente bajo para EU pero significativo para nosotros, haciendo sostenible todo nuestro sistema penitenciario”. No se reveló el importe de la tarifa.
Bukele informó que los deportados de Estados Unidos serían alojados en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), el complejo penitenciario de máxima seguridad que, según se informa, alberga actualmente a 20.000 presos de las mortíferas bandas MS-13 y Barrio 18, pero tiene capacidad para 40.000, el mayor de Iberoamérica.
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