21 de febrero de 2025 (EIRNS) — En busca de un respiro de la tormenta causada por su participación en la estafa de la criptomoneda $LIBRA del 14 de febrero, la cual le estalló en la cara y lo implica a él y a su hermana Karina en un fraude a gran escala, tráfico de influencias y delitos financieros, el Presidente de Argentina, Javier Milei, llegó el 20 de febrero a Washington, D.C. para tener reuniones que espera incluyan al Presidente Donald Trump. En su país estábajo asedio, mientras se acumulan las pruebas en su contra, entre ellas informes de que su hermana y otros socios cercanos exigieron sobornos a otros operadores de criptomonedas a cambio de acceder al Presidente de Argentina. Pero esto es sólo el principio de la historia. La oficina del Fiscal Federal de Investigaciones Administrativas ya está actuando sobre las denuncias de corrupción que ha recibido relacionadas con el caso. Y un bufete de abogados con sede en Nueva York, Burford Law, ha interpuesto una demanda contra Milei, en representación de 300 víctimas estadounidenses de la estafa de la criptomoneda $LIBRA.

Milei llegó acompañado por su hermana (de la que es inseparable) y por el ministro de Finanzas, Luis Caputo. Hasta ahora, no va a tener una reunión oficial en la Casa Blanca con Trump, quien se encuentra en Mar-a-Largo, pero espera encontrarse con él en algún momento de la reunión del 22 de febrero del Comité de Acción Política Conservadora (CPAC) en Maryland, en la que hablará Milei y Trump dará el discurso de clausura. El jueves 20 Milei tenía previsto reunirse con su amigo Elon Musk, del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE por sus siglas en inglés), cuyas políticas de recorte presupuestario admira enormemente, y después, con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva. Hoy intervendrá en un acto en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y después se reunirá con el Presidente del Banco Mundial, Ajay Banga.

Milei está desesperado por conseguir un nuevo acuerdo con el FMI por valor de entre $10.000 y $15.000 millones de dólares, y espera que Trump le hable bien de él al Fondo. Pero parece poco probable que, una cantidad de ese tamaño, sea entregada en las condiciones actuales. La última delegación del FMI que visitó Argentina para su evaluación económica periódica, hace un mes, le dijo a Milei que hasta ahora había hecho un buen trabajo en materia de política económica, pero que era necesario trabajar más, como por ejemplo en la "flexibilización del tipo de cambio", la devaluación, levantar el control de cambios y llevar a cabo más reformas fiscales. También señaló que la tasa de pobreza del país (53%) era un problema, y que Milei debía "hacer más" para lograr una mayor aceptación popular de sus "reformas" de austeridad, algo muy difícil de conseguir cuando las reformas matan a la gente. En enero, el consumo popular se desplomó un 10,6% interanual.

Después de esa visita, el FMI indicó que lo ms probable es que sólo proporcionará a Argentina una cantidad que cubra los pagos adeudados al FMI este año (o sea, un refinanciamiento del pago atrasado), y posiblemente un poco más para otras instituciones internacionales, entre $3.000 y $4.000 millones de dólares.