22 de febrero de 2025 (EIRNS) — En Londres, los planificadores de la política debaten ahora la cuestión existencial: ¿Cómo puede continuar su imperio cuando la “asociación especial” (sic) de posguerra forjada por Winston Churchill con Estados Unidos se está “evaporandoo ante nuestros ojos”, en palabras del ex ministro de Estado del Ministerio de Asuntos Exteriores británico, Jeremy Browne, ahora director general de la Canning House del Reino Unido.

El acuerdo general parece haberse asentado sobre la urgencia de que el Reino Unido asuma el liderazgo de Europa, reuniéndola tras una concentración militar preparatoria para la guerra contra Rusia. El artículo de The Economist es muy descarado. Pero existe la preocupación de si algo de esto funcionará.

Bronwen Maddox, directora de Chatham House (Real Instituto de Asuntos Internacionales), y su secuaz argumentan que el Reino Unido, como “una de las pocas potencias militares de espectro completo en Europa”, es decir, con armamento nuclear, debería asumir el liderazgo de la defensa de Ucrania y Europa. Financiar el necesario refuerzo militar no será tan fácil, dadas las dificultades políticas para recortar los gastos sociales, pero “Londres ya está resultando un imán para muchas conversaciones informales en las primeras fases sobre si esto podría hacerse con bonos de defensa, bancos de desarrollo de defensa, préstamos mancomunados u otros planes”, informan.

Maddox y su equipo imaginan que Keith Starmer tiene cierta influencia en Washington, de modo que el Reino Unido podría quizás servir de “puente” entre Europa y Estados Unidos, para luego suspirar que “el Reino Unido puede tener que elegir entre Estados Unidos y Europa en algún momento”.

Sin embargo, la angustia en el informe de la BBC de Londres del 20 de febrero sobre “los enormes riesgos a los que se enfrenta Starmer” cuando se reúna con Trump en Washington el próximo jueves 27 de febrero es francamente divertida.

A la BBC le preocupa que “las relaciones transatlánticas están en pedazos... Es en este hervidero de enemistad ideológica donde sir Keir buscará audiencia cuando se reúna con el Presidente y su equipo en la Casa Blanca”. He aquí algunos de sus consejos:

Primer chiste: La BBC escribe que sir Keir tiene ventaja porque “es uno de los pocos líderes europeos que permanecerá en el poder durante toda su presidencia” (¡!).

Segundo chiste: La BBC cita el consejo de Lord Darroch, el ex embajador del Reino Unido en Washington a quien el Presidente Trump echó en su primer gobierno, ¡sobre cómo Starmer debería sugerirle a Trump que obtenga “un mejor acurdoo” adoptando las tácticas británicas con Rusia!

Tercer chiste: La BBC concluye citando a un funcionario anónimo: “Vivimos en una Presidencia de Estados Unidos que se basa en la diplomacia de las grandes potencias. Si podemos trabajar dentro de eso, bien. Si no, que Dios nos ayude”.