11 de marzo de 2025 (EIRNS) — Israel cortó la electricidad a la Franja de Gaza el 9 de marzo. El ministro de Energía, Eli Cohen, dijo que había dado instrucciones a la Corporación Eléctrica de Israel para que dejara inmediatamente de vender electricidad a las centrales eléctricas de Gaza. “Emplearemos todas las herramientas a nuestro alcance para que vuelvan los rehenes”, declaró Cohen. Desde el 2 de marzo, Israel ha bloqueado la entrada de ayuda humanitaria, medicinas, combustible y todos los demás bienes en Gaza, una política que recuerda a lo que hicieron los nazis en el gueto de Varsovia y que hoy es un crimen de guerra respaldado por el llamado mundo occidental “civilizado”.

El corte de electricidad afectará a la planta desalinizadora de Deir al-Balah, la única de este tipo que suministra agua potable a los palestinos de las zonas central y meridional de Gaza. «El 9 de marzo, Omar Shatata, funcionario de la autoridad del agua, dijo a CBC News desde la ciudad de Gaza: “Habrá grandes dificultades para suministrar agua…. Necesitamos una solución. El agua potable es la base de la vida”.

La planta desalinizadora de Deir al-Balah suministraba a Gaza unos míseros 18.000 metros cúbicos de agua al día. Esa cantidad se ha reducido en un 86%, a unos 2.500 metros cúbicos diarios.

La fase 1 del alto al fuego, alcanzado el 15 de enero, expiró el 1º de marzo. Hamás y otras fuerzas palestinas han declarado que, de acuerdo con el plan de alto al fuego, ha llegado el momento de pasar a la segunda fase. Pero el Primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se ha negado y ha pedido una prórroga de la fase 1, con la esperanza de bloquear la realización de la fase 2.

El 7 de marzo, el diario Wall Street Journal publicó el artículo “Israel elabora nuevos planes de guerra para presionar a Hamás”, en el que se revela lo que Israel, y aparentemente el Presidente Donald Trump, han amenazado si Hamás no libera a más rehenes. El subtítulo del artículo es: “A medida que se estancan las conversaciones de alto al fuego, Israel ha trazado un plan para aumentar gradualmente la presión sobre Hamás hasta el punto de otra invasión de la Franja de Gaza”.

El Journal se refiere a un plan israelí para seguir con las matanzas: “Israel ha elaborado planes para una serie de medidas de escalada para aumentar gradualmente la presión sobre Hamas... Las medidas comenzaron la semana pasada con el bloqueo israelí de la entrada de bienes y suministros en Gaza. Los siguientes pasos incluirían el corte de electricidad y agua, dijo Bezalel Smotrich, el poderoso ministro de Finanzas de Israel, quien dijo que las medidas fueron discutidas en una reunión del gabinete el pasado fin de semana...

“Si esas medidas fracasan, Israel podría recurrir a una campaña de ataques aéreos e incursiones tácticas contra objetivos de Hamás, dijo un analista de seguridad israelí informado del plan. Luego, Israel podría desplazar de nuevo a los cientos de miles de palestinos que han aprovechado el alto al fuego para regresar a sus hogares en el norte de la Franja de Gaza... En última instancia, Israel podría volver a invadir Gaza con mucho más poder militar del que ha desplegado hasta ahora en el conflicto...

“’Hay la determinación de volver a entrar y acabar con Hamás pase lo que pase’, dijo el ex funcionario del Pentágono Michael Makovsky, que ahora es presidente del Instituto Judío para la Seguridad Nacional de Estados Unidos, un grupo de expertos con sede en Washington. ‘Creo que Israel será más duro y más fuerte’”. Eso garantizaría que no se perdonarán vidas.