17 de abril de 2025 (EIRNS) — Un informe del portal de noticias Axios destacaba ayer lo que parece ser una pugna en torno a la política hacia Irán dentro del gobierno. El Presidente Trump convocó una reunión en la Casa Blanca el lunes 14 de abril con los principales miembros de su gabinete. A favor de la diplomacia, incluso hasta el punto de hacer concesiones para llegar a un acuerdo con Irán, están J. D. Vance, Steve Witkoff y Pete Hegseth. Según sus fuentes, esa facción está “dirigida extraoficialmente” por Vance, quien, según afirman, está muy involucrado en las discusiones sobre la política hacia Irán. En el otro lado están Rubio y Waltz, que sostienen que no se puede confiar en Irán y apoyan la campaña de máxima presión.

Curiosamente, el informe de Axios también cita a un funcionario anónimo que afirma que Trump y el Primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, tienen opiniones radicalmente diferentes sobre cómo tratar con Irán, y que la visita de Netanyahu a Washington la semana pasada fue realmente embarazosa para él. “El Presidente disfrutó un poco fastidiándole [a Netanyahu] con Irán. La misma dinámica que se vio en público es la que se produjo en privado”, dijo el funcionario, refiriéndose a la rueda de prensa con los dos líderes. “Trump y Bibi ven las cosas de forma muy diferente en lo que respecta a un ataque militar contra Irán”. Algunos miembros del “bando del acuerdo” también consideran poco realista la insistencia de Netanyahu en que Irán debe eliminar todo su programa nuclear en cualquier acuerdo.

“La política hacia Irán no está muy clara, principalmente porque aún se está definiendo. Es complicada porque es un tema muy cargado políticamente”, dijo un funcionario a Axios. Del mismo modo, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, dijo a Axios: “El Presidente está orgulloso de tener un equipo con diferentes puntos de vista. Escucha a todos y finalmente toma la decisión que cree que es la mejor para el pueblo estadounidense”.

Si bien, por un lado, no se puede negar que Trump quiera escuchar todas las partes del debate, esto lo deja expuesto a los neoconservadores dentro y fuera de su gobierno, que aprovecharían cualquier oportunidad para iniciar esta guerra.