Executive Intelligence Review (www.larouchepub.com/spanish) Publican un nuevo informe que le da duro a Cheney por Lyndon H. Larouche. 14 de junioEl tercero de la serie de informes sobre los ``hombres-bestia'', que denuncia a las fuerzas británicas y estadounidenses pro imperialistas que están detrás de los crímenes del esposo de Lynne Cheney, el vicepresidente muerde alfombras Dick Cheney, inundará las calles de Washington, D.C., este jueves 17 de junio, y tambien aparecerá, un poco antes, en los sitios electrónicos internacionales de mi campaña. El informe, que lleva el apropiado título de ``The Sexual Congress for Cultural Fascism'' (El congreso sexual a favor del fascismo cultural), describe, con hechos concretos, los orígenes políticos de la actual conexión de Cheney y sus cómplices con una operación lanzada allá en los 1940 por los círculos que odiaban a Franklin Roosevelt, desde lugares como Londres, la ciudad de Nueva York y Nashville, Tennessee. Al final de la Segunda Guerra Mundial, elementos renegados de nuestra élite dirigente, que trabajaban en concierto con remanentes selectos del aparato nazi, destaparon esta operación subversiva contra nuestra república. Esta operación se confeccionó para que fuera una campaña de guerra cultural de corte fascista contra las tradiciones clásicas de los Estados Unidos y otras naciones. No es mera coincidencia, en lo que ahora es no hecho obvio, que los agentes del Gobierno de Bush y Cheney hayan copiado de forma deliberada los precedentes nazis, para cometer los crímenes hitlerianos que este Gobierno ha autorizado y perpetrado en sus campos de prisioneros en Guantánamo, Afganistán e Iraq. El informe documenta un caso que deja al descubierto la alianza entre los Cheney y el primer ministro británico Tony Blair, para lanzar lo que ellos mismos han definido como una ``guerra nuclear preventiva'' contra una serie de blancos en Eurasia. Su operación en marcha es producto del debilitamiento generalizado de la mente y la moral de muchos a ambos lados del Atlántico, mediante un programa de guerra cultural emprendido por círculos asociados con Allen Dulles y otros, para desarraigar el carácter de los Esatados Unidos de América de Franklin Roosevelt en tanto la principal nación productora del mundo. Con este fin, estos círculos han trabajado por cerca de 60 años en su intento por extirpar los valores culturales clásicos, como los de los EUA de Roosevelt, en la Alemania ocupada y despues de la ocupación, al igual que en otras naciones. Este programa de guerra cultural, que produjo la ``contracultura juvenil del sexo, las drogas y el rock'' de fines de los 1960, y la explosión internacional del narcotráfico, entre otros efectos, se realizó bajo un esquema que lanzaron los fanáticos utopistas fabianos H.G. Wells y Bertrand Russell, un plan que incluía la política de Russell, hecha pública en septiembre de 1946, de crear un ``gobierno mundial'' mediante el terror de las armas nucleares. Las pruebas documentadas son que esto abarcó el mentado ``proyecto cibernética'' de Russell, el ``fundamentalismo religioso'' estilo Fraternidad que promovieron los fabianos, y la depravación general esparcida bajo el nombre de ``El congreso por la libertad cultural''. La corrupción cultural inducida por estos y otros medios creó las condiciones bajo las cuales se tolerarían las políticas y prácticas del ``hombre-bestia'' Cheney, al grado que esto ha sucedido. Un apéndice del informe documenta una operación que se promovió en la prensa internacional contra mi candidatura. Esta operación se lanzó en los principales órganos de difusión de la Europa continental y de los EU, directamente desde del número 10 de la calle Downing del fabiano belicista y primer ministro británico Tony Blair, a través de criaturas amigas suyas de la liberal e imperialista Sociedad Fabiana. Entre las últimas criaturas de la nómina aparece, de manera prominente, la baronesa británica y compinche de la familia Cheney, Liz Symons, su familia, y otros círculos de Londres. El plan era lanzar esta operación iniciada desde Londres en el momento en que el Gobierno británico estaba involucrado en el caso del supuesto suicidio del experto británico en inteligencia, el doctor David Kelly, quien denunció el carácter ``sexualizado'' de la información que se usó para lanzar la guerra contra Iraq en el período de junio y julio a través de los principales circuitos de la prensa estadounidense, como parte de una intervención del Gobierno británico en la programación de la próxima convención nacional del Partido Demócrata en Boston, este año. Ahora bien, las elecciones más recientes le propinaron al propio Blair una derrota políticamente sangrienta en Gran Bretaña. A este respecto, uno se pregunta cuántos cómplices seguirá encontrando entre los organizadores de la convención demócrata de Boston, o en cualquier otro lado. [Paid for by LaRouche in 2004] |
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