Otros artículos importantes
Una alianza global por el desarrollo le propone LaRouche a los contadores peruanos
por Gretchen Small
23 de Febrero de 2001
El estadista estadounidense Lyndon LaRouche se puso al tú por tú con los matones del Proyecto Democracia en Perú. En una videoconferencia interactiva realizada en Lima y a la que asistieron 400 personas, LaRouche sostuvo un acalorado debate con dos de las cinco personalidades invitadas a responder a LaRouche.
El debate, disponible en la internet en www.larouchepub.com, se concentró en la estrategia de LaRouche para salvar a naciones y pueblos de la catástrofe que los azota ahora que la economía mundial estalla, estrategia opuesta a las fraudulentas campañas "contra la corrupción" que usa el Proyecto Democracia para desgarrar a los gobiernos del mundo. Al final, los nacionalistas peruanos que asistieron a la conferencia quedaron deleitados y remoralizados por el liderazgo de LaRouche.
La conferencia fue auspiciada por el Colegio de Contadores Públicos de Lima. Hace exactamente un año, los contadores de Lima patrocinaron la primera videoconferencia de LaRouche a la que asistieron 500 personas. Con ella, LaRouche se convirtió en la referencia estratégica para los nacionalistas en su dura batalla, últimamente perdida, por evitar que la narcomaquinaria del Proyecto Democracia se apoderara de Perú.
Ahora Perú es un país diferente. El gobierno impuesto por el Departamento de Estado ha creado un régimen de persecución en contra de los patriotas que derrotaron a Sendero Luminoso y los narcoterroristas de Movimiento Revolucionario Tupac Amaru (MRTA) en los noventas. Generales y otros militares, empresarios, miembros del Congreso, dueños de periódicos y teledifusoras, etc., pasan a ocupar las celdas carcelarias que dejaron vacías los terroristas liberados. Lo último que la banda que gobierna hoy al Perú quería que pasara es que los peruanos tuvieran de nuevo acceso directo a LaRouche. Hicieron circo, maroma y teatro para impedir que la conferencia se llevara a cabo, pero ninguna de sus tácticas intimidatorias funcionó; así que se vieron forzados a debatir.
Motivos de optimismo
En su exposición inicial, LaRouche explicó cómo viene trabajando por todo el mundo para "unir mentes, estén dentro o fuera del gobierno", para discutir las opciones y precedentes disponibles para salir de esta crisis. Subrayó que Perú y el hemisferio occidental en su conjunto pueden activar su gran potencial económico ejecutando obras de infraestructura necesarias a largo plazo como parte del plan de reconstrucción mundial con eje en Europa y Asia.
Mi esperanza, dijo, es "que juntando fuerzas intelectuales y de otra índole en torno a un entendimiento de lo que el mundo necesita, podemos inducir a que los gobiernos se sienten a la mesa para adoptar el tipo de acuerdos que serían señalados por un Nuevo Bretton Woods".
Uno de los participantes, el doctor Luis Lizárraga Pérez, profesor de finanzas de la Universidad de Lima, participó también en la primera videoconferenca de LaRouche. Lizárraga Pérez le recordó al público que LaRouche había advertido en ese entonces que la economía de los Estados Unidos se iba a hundir, y subraryó que se ha comprobado que LaRouche estuvo en lo correcto. Lizárraga Pérez, junto con el militante larouchista peruano Luis Vásquez y el destacado periodista peruano Patricio Ricketts, entablaron un diálogo sobre cómo se puede defender Perú a sí mismo, incluso cuando se enfrenta a un creciente caos interno y es golpeado por el acelerado hundimiento internacional.[FIGURE 1]
¡Hablando de corrupción!
Dos participantes fueron con una sola intención: desacreditar a LaRouche. Fueron Dennis Falvy Valdivieso, ex presidente de la Asociación de Economistas de Lima y columnista del diario proterrorista La República, y Alejandro Indacochea, profesor de de administración de empresas de la Universidad Católica de Perú.
Los dos juzgaron conveniente elogiar el trabajo de LaRouche en lo internacional, pero histéricamente acusaron a LaRouche de dañar la "democracia" en Perú por defender la guerra que contra las drogas y el terrorismo libró el gobierno de Alberto Fujimori. La estrategia de LaRouche está equivocada, insistieron. Según estos tipos, a los peruanos les importa un comino el desarrollo económico de Perú o la crisis económica internacional; lo único que les importa es cómo deshacerse de lo que queda del gobierno "corrupto" de Fujimori.
¿Quieren hablar de corrupción? ¿Quieren hablar del prolegalizador número uno? Es el Diálogo Interamericano, respondió LaRouche. La raíz de la corrupción hoy día, descansa en el sistema desregulador radical del libre comercio, defendido por economistas monetaristas como Milton Friedman, cuyo santo patrón, Bernard Mandeville, promovió sin tapujos la corrupción. "Mandeville dijo que el bien proviene del mal; así que debe legalizarse el mal para poder obtener el bien común".
Hay dos tipos de ganancia, explicó LaRouche: la ganancia Física, producida por el aumento de la riqueza física, y la ganancia meramente financiera. Con el esquema económico posterior a 1971, un empresario ya no puede obtener ganancia por aumentar su capital físico, sino que puede hacer ganancia financiera por medio de varios trucos. Por lo tanto, "el problema del aumento de la corrupción ha venido primordialmente de que hemos dejado de ser proteccionistas". Observen, el aumento en los precios de la energía en California. ¡Eso es corrupción legalizada! Sólo regresando a una economía proteccionista que promueve a los que contribuyen al enriquecimiento nacional y al desarrollo, la corrupción podrá ser erradicada, dijo LaRouche.