por Sara Madueño

La estabilidad del gobierno de Alejandro Toledo es de pronóstico reservado. A nueve meses de haber asumido la Presidencia de la República del Perú —con el apoyo de un millón de dólares del narcolegalizador George Soros, y un golpe de Estado organizado por Wall Street y el Departamento de Estado de Estados Unidos contra el gobierno anterior de Alberto Fujimori—, el 71% de la población peruana desaprueba su gestión, según una encuesta realizada por Analistas y Consultores, que se dio a conocer el 6 de mayo. ÜscPoco antes, una encuesta realizada por la Universidad de Lima registró un 66% de desaprobación y 25% de aprobación. Cuando Toledo fue juramentado en julio pasado, contaba con un 60% de aprobación, y apenas un 11% de desaprobación. ÜecDada la debacle de Toledo, no sorprendería un pronto desenlace similar al de Fernando de la Rúa en Argentina, quien tuvo que renunciar a la Presidencia de ese país antes de concluir su gestión.

Según las encuestas, el 66% de la población también rechaza las privatizaciones de las empresas estatales, el eje central de la política económica de Toledo, y el 75% opina que Toledo ha incumplido sus promesas de campaña, y que su política económica no tiene "rostro humano".

Es más, según una encuesta de la Universidad de Lima, ¡la gestión del ex presidente Fujimori hoy tiene un nivel de aprobación superior a la de Toledo!Üsc El 31,5% aprueba la gestión de diez años de Fujimori (1990–2000), mientras que sólo el 25% aprueba la de Toledo.Üec Según la misma encuesta, para el 45%, en el Perú de Toledo no existe la democracia.

Al margen de las encuestas, a principios de mayo una multitud abucheó a Toledo, y sus guardaespaldas tuvieron que sacarlo de urgencia de Gamarra en Lima, el complejo industrial-comercial más grande del Perú. La enardecida multitudle tiró botellas de plástico vacías y todo tipo de desperdicios al mandatario.

El país entero enfrenta un panorama de convulsión social sin precedentes: paros, huelgas, marchas, mítines en rechazo a las mismas políticas económicas neoliberales que llevaron a la Argentina al despeñadero. Y es que Toledo, fiel a su compromiso con la banca y las empresas multinacionales que lo auspician, ha puesto la conducción de la economía nacional en manos del ministro de Economía que seleccionó Wall Street, Pedro Pablo Kuczynski (PPK), el hombre de Soros en Perú. PPK, a quien el diario pro gobierno La República bautizó certeramente como el "Virrey Kuczynski", tiene como misión principal acelerar el proceso de privatizaciones, particularmente del sector energético y el sector agrícola.

Esto ha cobrado particular urgencia en los últimos meses, ya que la crisis económica ha producido un desplome de las recaudaciones fiscales, y un consecuente déficit en el gasto público, que PPK y sus amos internacionales ahora piensan cubrir con la venta del patrimonio nacional.

El Complejo Hidroeléctrico del Mantaro es la joya de la corona. La hidroeléctrica Santiago Antúnez de Mayolo, la más grande del país, con un potencial de 1.200 megavatios, forma parte de dicho complejo y representa el 95% del total de activos de la Empresa de Electricidad Perú, S.A. (Electroperú), del Estado. Esta hidroeléctrica es además la base del Sistema Interconectado Centro Norte (SICN), que abastace de electricidad a 12 de los 24 departamentos del Perú, incluyendo a Lima. Además del complejo del Mantaro, PPK ha puesto a la venta a la comercializadora Electrocentro.

Generación Eléctrica de Arequipa, S.A. (Egasa), y Generación del Sur (Egesur), también están en lista para la privatización a corto plazo. Egasa le provee electricidad al estratégico departamento de Arequipa, y Egesur abastece a varios departamentos del sur. Ambas empresas son rentables. Egasa, como señalara recientemente su ex presidente, Armando Fúster Rossi, forma parte de un complejo hídrico, energético y agrario que no puede dividirse, y que tiene que manejarse como una unidad para poder transvasar las aguas altiplánicas hacia la árida costa del Pacífico.Üsc Por lo tanto, explicó Fúster, existen razones de peso para no privatizar Egasa.Üec

Movilización popular

El primero de mayo, Día del Trabajo, fue precedido de un paro total de 48 horas en el centro del país en rechazo al liberalismo económico del gobierno y, en particular, a las privatizaciones de los complejos del Mantaro y de Electrocentro. Los manifestantes, que voceaban "Kuczynski es el gringo, Toledo es su cholo", bloquearon cerca de cinco kilómetros de la Carretera Central y los principales puentes de la región, impidiendo el transporte de carga y de pasajeros hacia Lima.

Al mismo tiempo, en el norte del país, se paralizó la ciudad de Talara, en rechazo a la privatización de la refinería de petróleo que se encuentra ahí, y que también está en la mira. Y la Convención Macrorregional de Productores Agropecuarios del Centro (Conveagro), que agrupa a más de 150 mil productores, anunció el inicio de un paro regional indefinido en la llamada despensa agrícola del Perú. Se anticipaba que este paro afectaría al 60% del mercado de productos alimenticios de Lima. La exigencia principal era la reactivación del agro y la suspensión de la importación de alimentos, que han saturado el mercado nacional con productos subsidiados en su país de origen, lo que representa una competencia desleal para la producción agrícola del Perú.

A fines de abril, Lima también fue escenario de una gran marcha hacia el Congreso de la República y el Palacio de Gobierno, que llevaron a cabo unos diez mil trabajadores convocados por la izquierdista Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP), en contra de las privatizaciones, y en demanda de empleo y de la revisión de la política económica y exterior del gobierno. Luego de entregar el pliego de sus exigencias al Congreso y al Ejecutivo, el secretario general de la CGTP, Juan José Gorriti, anunció que habría un paro nacional el 14 de mayo, en apoyo a las mismas demandas.

A mediados de abril, también hubo un paro total de 48 horas en el sur del país contra la privatización de Egesur y Egasa. En esa ocasión, se realizó un mitin multitudinario en Arequipa, la segunda ciudad más grande del Perú.

Unas semanas antes, se celebró en Lima una importante conferencia que sirvió para darle orientación estratégica y programática a todo este fermento popular. El 20 de marzo, la Asociación de Cesantes y Jubilados de Petroperú (ACEJUB), y la revista EIR, de Lyndon LaRouche, conjuntamente organizaron la conferencia "Alto a un argentinazo en Perú: cambiemos la política económica y a PPK, el padre de las privatizaciones". Ante un auditorio de más de 300 personas, se documentó como PPK es el peón de Soros en el Perú, y que ha gestado las privatizaciones desde que ocupó la cartera de Energía y Minas en los 1980.

El Ing. Luis E. Vásquez, director ejecutivo de EIR en Perú, advirtió que PPK es una especie de clon del ex ministro de Economía de Argentina, Domingo Cavallo, ahora preso por sus crímenes contra el país, y que "Perú debe verse en los ojos de Argentina". El Ing. Carlos Repetto Grand, presidente de la ACEJUB Petroperú y ex gerente del área de Refinación y Petroquímica de esa empresa estatal, expuso sobre "los orígenes y el fracaso del proceso privatizador de Petroperú".

Ese mismo día, el Ing. Repetto encabezó una marcha al Congreso de la República para entregar un proyecto de ley para darle marcha atrás al proceso de privatizar esa estratégica empresa nacional. El proyecto fue acompañado de las 50.000 firmas requeridas por ley.

El clamor ciudadano ha hecho eco en algunos congresistas. Hace poco, grupos de congresistas de varios partidos sometieron hasta 5 proyectos de ley a la consideración del Congreso, para declarar inalienable a todo el sector hidroeléctrico nacional, y específicamente excluir a la hidroeléctrica del Mantaro de la lista de empresas a privatizar.

Además de argumentar sobre la importancia estratégica del sector, los congresistas —dos de los cuales son del propio partido de gobierno, Perú Posible (PP), otros tantos son de sus aliados de Acción Popular (AP) y del Frente Independiente Moralizador (FIM), mientras que la mayor parte son de los partidos opositores Unidad Nacional (UN) y APRA— dejaron claro que se trata de empresas eficientes.Üsc Por ejemplo, el complejo del Mantaro fue distinguido el año pasado con la certificación ISO 9002, por parte de la empresa SGS del Perú, acreditada por la compañía Belcert de Bélgica. Es decir, el argumento de la supuesta ineficiencia de las plantas que se usa a menudo para justificar su venta, carece de sustento.Üec Además, señalan los legisladores, este complejo es propiedad del Fondo Nacional de Ahorro Público (FONAHPU), que permite el pago de las pensiones de los jubilados.

Kuczynaki es sin duda la figura emblemática que repulsa la población. Desde que asumió el cargo, él mismo se ha encargado de dejar claro que él gobierna al país en materia económica, por gracia de la banca internacional. A principios de mayo, por ejemplo, haciendo oídos sordos al clamor ciudadano, advirtió que proseguirá con las privatizaciones del sector energético y que ninguna de las empresas eléctricas será sometida a referéndum, como han pedido algunos opositores. Por su parte, la oposición en el Congreso viene reuniendo firmas para la interpelación de PPK, lo que se anticipaba podría ocurrir a mediados de mayo. Algunos órganos de difusión, como La República y la revista Caretas, ya anunciaban la próxima salida de PPK del gobierno.

El propio Toledo se ha encargado de propalar a los cuatro vientos que el futuro de PPK es el suyo. Ya electo Presidente, y habiendo escogido a PPK como su ministro de Economía, en julio pasado el eufórico Toledo adulaba a un grupo de banqueros neoyorquinos, prometiéndoles que Kuczynski "se quedará hasta el último día de mi gestión". De hecho, el nombramiento de PPK fue la condición capital que le impuso la banca a Toledo para respaldar su campaña presidencial, como lo reconoció sin ambages un artículo del Wall Street Journal, reproducido en el diario peruano El Comercio el 11 de mayo del 2001. PPK, explica el artículo, ha devenido "de banquero de Wall Street a operador clave en las próximas elecciones peruanas", y "su presencia es un gran activo para Alejandro Toledo". Irónicamente, ese mismo artículo citaba al hoy encarcelado ministro de Economía argentino, Cavallo, quien respaldaba a PPK como colega suyo y como "un muy buen economista".

Es posible que la población peruana terminará dándole a PPK las mismas gracias que la Argentina le está dando a Cavallo.