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Resumen electrónico de EIR, Vol. II, núm. 01
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Un alto asesor del recién elegido presidente de Corea del Sur, Roh Moo-hyun, atacó públicamente al FMI, tachándolo de afrenta a la soberanía coreana. El profesor Yoon Young-kwan de la Universidad Nacional de Seúl, director del subcomité para la unificación, relaciones exteriores y seguridad del equipo de transición de Roh, dijo el 28 de diciembre de 2002 que "Washington encaró la crisis económica de Corea del Sur en 1997, no con la debida preocupación por la seguridad nacional sudcoreana, sino con la intención de promover los intereses de Wall Street". También atacó a los Estados Unidos por utilizar al FMI cmo herramienta para forzar la apertura de Corea. Esto es algo que el presidente Kim Dae-jung nunca se atrevió a hacer, y constituye un rompimiento con las prácticas pasadas del partido de la apertura, que consistían en equiparar la "reforma librecambista del FMI" con la "libertad", en gran medida el mismo error que cometieron las élites de Europa Oriental en 1989. Esta nueva formulación es puro "factor LaRouche"..
Mientras el presidente George W. Bush habla de bonanza, el Departamento del Trabajo de los Estados Unidos, alegando falta de recursos, anunció que dejará de publicar sus informes mensuales sobre el desempleo estadounidense. El recorte al financiamiento de la Administración del Empleo y la Capacitación (ETA, siglas en inglés) del Departamento del Trabajo el 31 de diciembre de 2002, le dio el pretexto al Buró de Estadísticas del Empleo para dejar de publicar sus informes mensuales sobre los despidos generalizados en los EU, que detallaban, por estado, el número de despidos —de 50 o más— en cada industria (muchos debido al cierre de plantas), basados en la solicitud de seguros de desempleo. El Departamento del Trabajo ya no podía costear los informes, con un costó de cerca de 6.600 millones de dólares anuales, dijo Mason Bishop, subsecretario de la ETA. El informe final, emitido el 24 de diciembre, señalaba que 2.150 empleadores estadounidenses iniciaron despidos generalizados en noviembre, afectando a más de 240.000 trabajadores, de los cuales, el 33% están empleados en la industria manufacturera. "Los estados habían llegado a confiar en esta información como un indicador económico y como herramienta para tomar decisiones ejecutivas en la prestación de servicios y distribución de fondos para programas desplazados", escribió Catherine Leapheart, presidenta de la Asociación Nacional de Agencias de Empleo Estatales, en una carta que le enviara a la secretaria del Trabajo, Elaine Chao..
El New York Post, el Guardian de Londres y el Washington Times publicaron sendos artículos noticiosos el día de Año Nuevo, lamentándose de que el 2002 fue el peor año en más de 60 años para las bolsas de valores del mundo. El FTSI 100, principal índice bursátil de la Gran Bretaña, registró el peor desplome de su historia el 2002, perdiendo 25% de su valor, y llegando a su tercer año consecutivo con pérdidas. El Índice Industrial Dow Jones en los Estados Unidos terminó el año 17% abajo, y el índice "tecnológico" NASDAQ registró una pérdida anual de 31%. Un cable noticioso de Reuters, en un resumen del mismo cuadro económico sombrío, dijo: "Como hace un año, la economía estadounidense entra al 2003 en condiciones incómodas. La preocupación por las consecuencias de una potencial guerra contra Iraq tienden manto de temor sobre las perspectivas para 2003, tal como la que sobrevino en 2002 por efecto de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001; año que muchos estadounidenses quisieran olvidar. El valor de las acciones en 2002 cerró con su primera racha de tres años de perdidas desde 1939 a 1941. La temporada decembrina de compras trajo poco regocijo, con las empresas despidiendo empleados todavía por miles, y con estadísticas que muestran un humor de los consumidores más áspero". El artículo advierte que una inminente guerra contra Iraq, acompañada de nuevos ataques terroristas, podría elevar el precio del petróleo a más de 80 dólares por barril. |
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El periódico judío neoyorkino Forward, haciéndose eco de la cobertura del periódico Ha'aretz y otros órganos de prensa israelíes, informó recientemente que la elección del Likud en Israel parece una escena salida de la serie de televisión "Los Sopranos". Forward se ve obligado a reproducir las declaraciones del candidato del Partido Laborista, Amram Mitzna, de que, "no cabe duda que aparentemente el crimen organizado está infiltrando a un partido, un partido en el poder". El artículo está repleto de detalles acerca de la "corrupción" del Likud, tales como el de los contratistas de votos "haciéndose de prostitutas caras", pagadas por los candidatos del Likud y sus sostenes económicos (se dice que costaba 70 mil dólares garantizar una posición asegurada en la planilla electoral del Likud). El artículo se centra en la historia de la familia mafiosa de los hermanos Gavrieli, cuyos elementos en el Likud, según Forward, incluyen al ministro de Seguridad, Uzi Landau, su ayudante Gideon Ezra y los ministros Danny Naveh y Roni Milo. Otro elemento del escándalo que se describe es el hecho de que el ala de Netanyahu está atacando al jefe de la división de investigaciones de la policía, Moshe Mizrahi, quien se encuentra a cargo de las investigaciones y alegatos de corrupción del Likud, pero que "está acusado de grabar subrepticiamente conversaciones telefónicas entre Netanyahu y el legislador derechista Avigdor Lieberman". También se ha venido exigiendo la renuncia de Mizrahi a través de una campaña de prensa. La relación entre Netanyahu y el racista Lieberman del partido Unión Nacional/Beitanu, es un tema candente en Israel.
El secretario de Estado Colin Powell, en un programa televisivo el 29 de diciembre de 2002, dijo que Bush "no ha tomado tadavía la decisión con respecto al uso de la fuerza militar" contra Iraq, y "desea una solución pacífica". Powell dijo que los Estados Unidos esperan los resultados del trabajo de los inspectores de armas de la ONU enviados a Iraq, antes de decidir si volver al Consejo de Seguridad de la ONU para exigir nuevas medidas contra Iraq. "El Presidente no ha tomado todavía la decisión con respecto al uso de fuerza militar, o respecto a regresar de nuevo a las Naciones Unidas", dijo Powell en el programa de NBC, Meet the Press. Bush "no ha" decidido usar la fuerza militar contra Iraq, dijo Powell a Fox News Sunday. "Quiere una solución pacífica, pero al mismo tiempo estamos considerando acciones prudentes, con una posición de nuestras fuerzas de modo que estén listas para hacer lo que se requiera", dijo Powell.
El gobierno sudafricano del Congreso Nacional Africano (CAN), ha puesto al vih/sida a la cabeza de su programa de desarrollo, según una declaración oficial emitida el 19 de diciembre en la conferencia nacional de CAN en Stellenbosch, Sudáfrica. Joel Netshitenzhe, vocero y analista principal del CAN dijo a reporteros de prensa que "el CAN reconoce ahora que el sida ha crecido para convertirse en un problema enorme desde la última conferencia del partido CNA en 1997 y estamos preparados para bregar con esto". La declaración oficial sobre la estrategia de desarrollo dice en parte: "Dado el avance del sida epidémico... nuestro programa de transformación no sólo debe reconocer este peligro, sino también ponerlo a la cabeza de nuestro programa". El secretario general del CAN, Kgolema Motlanthe, dijo que el partido diseñó una estrategia que incluía una provisión para medicinas contra el sida y para la reducción de la pobreza. El presidente Thabo Mbeki, reelegido como líder del CAN para otro período de 5 años en esta conferencia, ha dejado de cuestionar la relación entre el VIH y el sida desde hace tiempo, por lo menos en público. La semilla de esta duda la plantó el médico charlatán Peter Dusberg y sus colaboradores. |
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El gabinete del Presidente "Lula" es un revoltijo de diversas posiciones políticas
El Financial Times y los cables de Bloomberg del 1 de enero se muestran muy complacidos con el ministro de Finanzas, Antonio Palocci, a quien el Times señala como promotor de la "ortodoxia económica". Además de prometer que "garantizará inequívocamente la sustenibilidad de la deuda pública de Brasil", Palocci declaró al Times que no habrá "medidas exóticas, o incumplimientos de contratos, o irresponsabilidad fiscal", y que la orden del día será una "política fiscal y monetaria rígida". Palocci salió de una reunión con el representante comercial de los EU, Robert Zoellick, a declarar que habían creado un importante canal para el diálogo con el gobierno de Bush, mientras que Zoellick dijo que podría haber colaboración entre el Departamento del Tesoro estadounidense y el Ministerio de Finanzas de Brasil. Otra integrante del gabinete del agrado del Financial Times es la ministra del Ambiente, Marina Silva, una pieza importante de la "mafia verde", a la que la organización de LaRouche ha venido combatiendo por años. Silva representa "el nuevo tipo de funcionario que está llegando al poder" con Lula, se regodea el Financial Times. Por otra parte, el nuevo ministro de Cultura es Gilberto Gil, un estrella de la música pop que refleja los peores elementos de la política del Partido de los Trabajadores. Contrapunto interesante, es el hecho de que el ministro de Relaciones Exteriores, Celso Amorim, un diplomático de carrera, volvió a contratar a Samuel Pinheiro Guimaraes para ocupar el segundo puesto como secretario de Itamaraty (Ministerio de Relaciones Exteriores). Pinheiro Guimaraes es un crítico acerbo del Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), y durante la presidencia de Cardoso hizo tales ataques contra el susodicho plan, en el sentido de que Brasil jamás sería parte de él, que fue despedido por el entonces ministro Celso Lafer. Los observadores alegan estar sorprendidos por la decisión de Amorim sobre Pinheiro Guimaraes, en tanto que parece "contradecir" la declarada política exterior del ministro. Cuando un reportero le preguntó a Amorim si la contratación de Pinheiro ponía en peligro las negociaciones del ALCA, Amorim respondio: "Eso depende de Zoellick", añadiendo que Pinheiro seguirá la política exterior definida por el Presidente. En su discurso de toma de posesión, Amorim hizo un ataque abierto al unilateralismo de los EU y pidió una solución pacífica al conflicto del Oriente Medio.
El presidente venezolano Hugo Chávez aseguró en su discurso a la nación del 1 de enero, que el año 2003 "será un buen año" para la revolución, y apeló al "coraje histórico del pueblo" para dar la batalla contra "uno de los peores actos de sabotaje contra Venezuela", refiriéndose a la ya larga huelga general contra su gobierno. La oposición, por su parte, ha prometido no cejar en 2003 en su campaña contra Chávez, y ha añadido a la huelga cívica que mantiene al país paralizado, particularmente en el sector petrolero, el arma de la revuelta fiscal. El líder de la oposición Antonio Ledezma declaró en conferencia de prensa que, "estaban anunciando una campaña de desobediencia de impuestos", que implica que no se pagarán impuestos a partir de ese momento.
Chávez estuvo en Brasil para asistir a la toma de posesión del presidente Luiz Inácio "Lula" da Silva, y declaró a la prensa que esperaba que el sector petrolero de su país alcanzaría la capacidad de producción previa a la huelga, en 45 días. La oposición alega que Chávez miente con todos los dientes y presentó un cuadro totalmente divergente al presentado por Chávez. Chávez le pidió a Lula y a otros jefes de estado, incluyendo al de Ecuador, país productor de pretróleo, que envíen técnicos y trabajadores petroleros como esquiroles a Venezuela, para ayudar a romper la huelga de los trabajadores de la compañía estatal petrolera. Lula le dijo que consideraría la petición, mientras Chávez aseguró que había obtenido promesas de ayuda de México, Brasil y Ecuador. Un editorial del Washington post del 2 de enero, dice que la "pesadilla" del caos cada vez mayor en Venezuela demuestra que el abandono del modelo del FMI no funciona, que Washington, preocupado por Iraq, se ha "tropezado" en Venezuela y que tal vez Lula tendría que "tomar la iniciativa" e intervenir con dicha joya de sabiduría. Irónicamente, el editorial del Post acierta involuntariamente al decir que los casos de Argentina y Venezuela "demuestran de manera vívida qué peligroso resultó apartarse del modelo (del FMI), a falta de una alternativa coherente".
Según el informe publicado en el diario Clarín el 29 de diciembre, el doctor Luis Marcelo Albaca dijo que la mortalidad entre los niños en un pueblo tucumano de Argentina "es sólo comparable a la de los países africanos". Dieciocho niños han muerto en los últimos dos meses en la provincia norteña de Tucumán. El doctor Albaca dijo que en el pueblo de Simoca, donde falleció la última víctima, las condiciones son impresionantes. "Hay un nivel de desnutrición y mortalidad infantil sólo comparable al de los países africanos y ciertas regiones de la India, y la nación no hace nada", dijo. El doctor Albaca criticó duramente la "Operación Rescate" del gobierno, anunciada con bombos y platillos por la primera dama Hilda "Chiche" Duhalde, denominándolo "ineficiente y demagógico". Lo único que hicieron fue establecer un pequeño dispensario a unas cuadras del hospital de Simoca, "cuando lo que deberían haber hecho es ir a las zonas remotas e inhóspitas donde la gente no poder recibir atención [médica]". El doctor Albaca dijo que, tan sólo en Simoca, hay dos mil niños diagnosticados como desnutridos, y se ha confirmado que en la provincia hay 11.790 niños, de un total de 18.000, que sufren varios niveles de desnutrición. Y esto es sólo en una provincia. |
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