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Resumen electrónico de EIR, Vol. III, núm. 03
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Economía |
El 13 de febrero se introdujo en la Cámara de Diputados de Italia una nueva moción para instaurar un Nuevo Bretton Woods, es decir, una reorganización del sistema financiero internacional. La moción cuenta con el apoyo de 50 parlamentarios de todos los partidos italianos, con una mayoría del partido de oposición Margherita, pero también algunos de la coalición que integra el Gobierno del primer ministro Silvio Berlusconi. Entre ellos están Mario Lettieri, presidente de la Comisión de Finanzas del Congreso; Giovanni Bianchi, quien en 2001 organizara una presentación pública de Lyndon LaRouche ante el Parlamento italiano; los ex ministros Antonio Maccanico y Nerio Nesi, y el ex subsecretario de Relaciones Exteriores Ugo Intini. La moción señala que, "tras el derrumbe del LTCM, Enron, los bonos argentinos, Cirio, Parmalat y Finmatica, por mencionar sólo los casos más prominentes, debiera quedar claro para todos que enfrentamos una crisis sistémica real. Debido a la internacionalización de los mercados financieros, una nación sola, o incluso Europa sola, no puede garantizar el control y aplicación de leyes más fuertes con resolución. Hay una crisis de todo el sistema financiero centrado cada vez más en la especulación pura. Se calcula que toda la burbuja financiera, sumando el valor de los derivados financieros de toda forma de deuda existente, asciende a alrededor de 400.000 billones de dólares, contra un producto interno bruto mundial de poco más de 40.000 billones. Además de los mayores bancos italianos, los bancos estadounidenses involucrados en el caso Parmalat —JP Morgan Chase, Bank of America y Citigroup— son los principales responsables de este crecimiento estratosférico, como informó la Contraloría de la Moneda de los EU, una agencia del gobierno. En junio de 2003 JP Morgan llegó a la cifra de 33.300 millones de dólares en contratos con derivados, con una aumento de 4.500 millones en apenas 6 meses; Bank of America tenía 14.300 millones, y Citigroup 13.000 millones". La moción insta al Gobierno italiano a "actuar en los foros internacionales pertinentes para crear una nueva arquitectura financiera, con el fin de evitar futuros choques financieros y la recurrencia de burbujas financieras, y concentrada en el objetivo de apoyar la economía real; y emprender toda iniciativa necesaria para convocar tan pronto como sea posible a una conferencia internacional de jefes de Estado y gobiernos parecida a la realizada en Bretton Woods en 1944, para definir un nuevo sistema monetario y financiero global más justo".
La idea dominante en los círculos bancarios dirigentes de Occidente es responder a las inminentes sacudidas financieras de importancia con políticas "como esas de principios de los 1930", para proteger al sistema bancario a cualquier costo, y "hacer que pague la población", explicó a EIR el 11 de febrero una fuente británica con vínculos muy importantes en Europa. "Estoy de acuerdo con LaRouche en que estamos entrando a un período de volatilidad y crisis extremas. Pero mi comprensión del reflejo imperante en los círculos gobernantes es que no tenemos un enfoque como el de Franklin Delano Roosevelt, sino algo diseñado en base a lo que se hizo al inicio de la Gran Depresión, a principios de los 1930: que pague la población, y establecer una política neoliberal y monetarista que será un fracaso para el grueso de la población. Lo que oigo de la gente influyente es que 'no hay otra salida, sino apretarse el cinturón'. La preocupación es preservar el sistema bancario a cualquier costo".
El semanario alemán Stern publicó en su edición del 12 de febrero que existen al menos 1,1 millones de alemanes desempleados que no aparecen en el informe de enero de la Agencia Federal del Trabajo. La cifra "oficial" de 4,6 millones de desempleados no incluye las siguientes categorías: — 207.540 alemanes que participan en proyectos de recapacitación profesional; — 161.260 desempleados que no consiguen otro trabajo por motivos de salud, incluyendo la recuperación por una enfermedad; — 124.500 ciudadanos en proyectos de empleo financiados por una agencia federal, y otros 159.500 en proyectos similares financiados por los municipios; — 81.000 en otros programas de capacitación, y 19.400 extranjeros que participan en programas de estudio del alemán; — 392.000 ciudadanos entre los 58 y 64 años de edad que ya no aparecen en las listas por la muy alta probabilidad de que, por su edad, no puedan encontrar trabajo; — 2 millones de mujeres que sí quieren trabajar pero no encuentran empleo, o no pueden aceptarlo por motivos familiares, de salud u otros. Todos estos suman 7,7 millones de alemanes sin un trabajo real. Por consiguiente, el desempleo nacional ajustado no sería del 10%, sino más bien del 16%. La gran ironía es que todas las cifras vienen de la base oficial de datos de la Agencia Federal del Trabajo. |
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Es para nosotros causa de enorme tristeza tener que informar del fallecimiento el 17 de febrero del muy querido amigo y colaborador, por más de dos décadas, de Lyndon y Helga LaRouche, el ex presidente mexicano José López Portillo. Un verdadero estadista, López Portillo será recordado por sus valientes acciones en defensa de la soberanía de México y de Iberoamérica, durante y después de su período presidencial de 1976-1982. Como Presidente, propuso un programa arrojado para industrializar a México, y el 1 de septiembre de 1982, en el punto culminante de la crisis de la deuda de Iberoamérica, encolerizó a la oligarquía financiera angloamericana al nacionalizar la banca e imponer controles de cambio. En su Informe a la Nación en el que anunció dicha medida, advirtió: "La peste financiera hace estragos crecientes en todo el orbe. Como en el medievo, arrasa país tras país. La transmiten las ratas y su saldo es desempleo y miseria, quiebra industrial y enriquecimiento especulativo". Al nacionalizar la banca, López Portillo dijo en su discurso que esto liberaba a la libre iniciativa y al libre ímpetu productivo de los mexicanos, del libre comercio y de la camisa de fuerza impuesta por un sistema parasítico. Un mes después, en octubre de 1982 en un discurso histórico ante la Asamblea General de la ONU, López Portillo advirtió: "No podemos paralizar nuestras economías, ni hundir a nuestros pueblos en una mayor miseria para pagar una deuda cuyo servicio se triplicó sin nuestra participación ni responsabilidad y cuyas condiciones nos son impuestas. "Quiero ser enfático: los países del sur no hemos pecado contra la economía mundial. "No sigamos en este círculo vicioso, podría ser el principio de un nuevo oscurantismo medioeval sin posibilidad de renacimiento". La esperanza de López Portillo era que si Brasil y Argentina se unían a México en declarar una moratoria a la deuda en 1982, esto podría sentar las bases para construir un nuevo orden económico mundial. Pero ninguno de estos dos gobiernos tuvo el coraje de dar ese paso. Fue también en 1982 que López Portillo se reunió personalmente con Lyndon LaRouche, y poco después de esta reunión LaRouche elaboró su propuesta, Operación Juárez, a petición de los patriotas mexicanos. En diciembre de 1998 José López Portillo se reunió con Helga Zepp-LaRouche en un seminario en la Ciudad de México, donde dedicó estas palabras a su amigo: "Es hora de que el mundo escuche las sabias palabras de Lyndon LaRouche".
En un discurso en la Universidad Nacional de Defensa el 10 de febrero, el presidente estadounidense George W. Bush calificó la proliferación nuclear de una nueva amenaza terrorista, y propuso que un grupo de naciones se autoproclame como el órgano policial que evite la difusión de la tecnología de enriquecimiento uranio fuera de las pocas naciones que ya la poseen. El verdadero objetivo de la propuesta es hacer más que imposible de losque ya lo es para las naciones en vías de desarrollo, el echar mano de la energía nuclear para su desarrollo económico. En particular, Brasil e India están en la mira. El uranio enriquecido U-235, cuyo porcentaje de isótopos fisionables es mayor que el del mineral de uranio natural, que en su mayor parte contiene U-238, es el ingrediente necesario para la mayoría de los reactores nucleares. Las armas atómicas ocupan un uranio mucho muy enriquecido. La táctica wellsiana es no hacer distinción entre estas dos variedades de uranio, y hacer de las relaciones internacionales "una guerra de todos contra todos", asumiendo que cualquier país con capacidad de enriquecer uranio constituye una amenaza a la paz mundial. Bush propuso que las 40 naciones que identifica como el Grupo de Abasto Nuclear rehusen vender equipo para enriquecer y reprocesar uranio, y que le nieguen la tecnología a cualquier país que no cuente ya con plantas de enriquecimiento y reprocesamiento funcionando. Todo país tendrá que notificar de sus actividades y las instalaciones nucleares con que cuente, y permitir las inspecciones de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) prácticamente en cualquier momento. Las naciones que se rehusen no podrán importar equipo. Se fortalecerá la capacidad de control de la AIEA. Bush propuso también un aumento en el número de naciones que formen parte de la Iniciativa de Seguridad de Proliferación Nuclear (que ahora son 12), y en la vigilancia, incluyendo la cooperación con la Interpol en medidas policíacas y en la captura de envíos que violen los reglamentos mundiales vigentes.
El papel que desempeña Rusia es el "de un vínculo de unión entre Oriente y Occidente", escribió el ministro de Relaciones Exteriores ruso Igor Ivanov en la edición de enero de 2004 de la publicación Asia and Africa Today. Si bien Rusia tiene "inclinaciones" tanto europeas como asiáticas en su política exterior, "los intereses nacionales de Rusia requieren de manera objetiva prestarle una mayor atención a la inclinación asiática". Ivanov destacó que esto se debe al "crecimiento dinámico" en Asia en torno a las "industrias con uso intensivo de ciencia y alta tecnología". La tercera "nación espacial" en el mundo es China, que forma parte de Asia. Ivanov contrastó el crecimiento asiático con las malas condiciones que privan en la Rusia asiática, pese a su gran riqueza natural, su "poderosa" ciencia y base industrial, y una población "creativa". Rusia debe cambiar la situación con "la participación activa en la integración económica regional". Para Rusia, su relación con China tiene "importancia fundamental. Sin esfuerzos vigorosos para atraer a nuestros vecinos asiáticos, incluyendo a China, es imposible el desarrollo rápido de las regiones orientales de Rusia. Necesitamos una presencia asiática importante en el este de Rusia, tanto como de la integración de la economía rusa al emergente nuevo espacio económico de Asia. Esta es nuestra tarea estratégica de los años venideros". Ivanov apuntó al papel creciente de las asociaciones multilaterales y los nuevos mecanismos colectivos en Asia. Entre ellos se cuenta la Organización de Cooperación de Shanghai, las relaciones rusas con la ASEAN (Asociación de Naciones del Sureste Asiático) y la iniciativa de Kazaj para crear un "diálogo panasiático" a través de la Conferencia para el Aumento de la Interacción y la Confianza en Asia. Ivanov concluyó que la meta de tales asociaciones es "la seguridad común y la creación de condiciones óptimas para la prosperidad." |
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Enéas afirma que la propuesta del NBW de LaRouche 'es sensacional'
En una entrevista telefónica efectuada el 9 de febrero por Dennis Small, director de EIR para asuntos iberoamericanos, el doctor Enéas Carneiro, quien ganó la diputación al Congreso de Brasil a fines de 2002 con más de 1,5 millones de votos, el número más grande de la historia del país para un diputado, afirmó: "La idea [del Nuevo Bretton Woods de LaRouche] es excelente; la idea de que todos los países se sentasen en la mesa, liderados por algunos, como Rusia, y se llegase a una fórmula saludable, una fórmula de convivencia saludable, con una nueva moneda, con la quiebra del patrón dólar. Se puede decir que esta idea es una cosa muy bonita. El doctor Enéas reiteró enfático su bien conocida demanda de una "ruptura" inmediata con el sistema financiero mundial del FMI, dado que "no veo salida en el modelo. Por eso propuse la ruptura; fue por eso. Tendremos un período de dificultades [en Brasil], un período en que no tendríamos, tal vez, cómo importar los "chips" de computadora... pero tendríamos una luz al frente, en el horizonte. La idea de míster LaRouche es sensacional. "En el momento que Brasil pateara el tablero, sería seguido por un número enorme de países. En el momento en que Brasil dé su grito de independencia, sería seguido instantáneamente. Y ahí sería mucho más fácil, hasta la misma negociación por un Nuevo Bretton Woods, que es la idea de míster LaRouche". Al conocer del reciente llamado del candidato presidencial ruso Sergei Glazyev en favor de una nueva arquitectura financiera, el doctor Enéas respondió: "Es extremadamente agradable oír eso de un hombre que es un diputado electo, un representante legítimo de la población rusa y que, según me dijo, será candidato a la presidencia en Rusia. Veo con mucha alegría la declaración de él... porque avecinándose, como se avecina, el momento del crac, que será mucho peor de lo que pasó en 1929, mucho peor, se avecina también el momento en que esas voces tendrán eco. Concuerdo plenamente con él: una nueva arquitectura financiera es el camino". A la pregunta sobre el papel de Brasil en esta batalla internacional, el doctor Enéas dijo: "Yo pienso, por ejemplo, que el contacto con Rusia es fundamental; el contacto con China (que no conozco hasta la fecha); con la Malasia de Mahathir. En fin, pienso que ese movimiento de unión puede tener algún fruto; la unión con Rusia, quién sabe si con algunas fuerzas que hasta existen en los Estados Unidos. Ustedes están ahí; quiero creer que no están solitos".
El Gobierno de Jean-Bertrand Aristide, un sacerdote sinarquista renegado de "izquierda" cuyo movimiento se distingue por la práctica de quemar vivos a sus opositores colgándoles al cuello una llanta en llamas, fue reinstalado en el poder en 1994 por tropas militares de los Estados Unidos, cuando el gobierno de Clinton cayó en una manipulación británica. Jamás se concretó inversión alguna en la economía e infraestructura de ese país; la oposición exigió su tajada de poder, a lo que se negó Aristide lanzando en cambio sus turbas contra la misma. En los últimos tres años, bajo la dirección personal de Luigi Einaudi, un hampón kissingeriano de los banqueros y ex funcionario del Departamento de Estado estadounidense, se cortó todo tipo de ayuda a Haití —la nación más pobres del hemisferio— con el pretexto de que el Gobierno de Aristide no siguió procedimientos "democráticos". Casi 70% de la población vive en la pobreza. En un discurso que dio en Reston, Virginia, el 14 de febrero, el precandidato presidencial Lyndon H. LaRouche denunció que las políticas de los EU son responsables por el genocidio contra Haití, y que como Presidente él haría de la reconstrucción de esa devastada nación una prioridad. Haití es azotado por disturbios, la rebelión armada, el caos y la amenaza de una guerra civil. Su desintegración alcanzó un momento decisivo el 5 de febrero, con la toma de la cuarta ciudad más grande del país, Gonaives, a manos de ex miembros del movimiento de Aristide; la pandilla que se hacía llamar "el ejército caníbal" cuando apoyaba a Aristide. Ahora dicen ser la oposición, y prometen apoderarse de poblados por todo el país hasta llegar a la capital de Porto Príncipe. Esta no es una "oposición", es el lanzamiento del "hombre-bestia". Cuando el Gobierno de Aristide envió a la policía para retomar la ciudad el 7 de febrero, las muchedumbres enteraron, y mutilaron y golpearon los cuerpos de los muertos. Según el diario argentino Clarín, la organización Save the Children advierte que existe la amenaza de "una crisis humanitaria de vastísimas proporciones" en Haití. La organización humanitaria añade que, "si los enfrentamientos entre opositores y fieles a... Aristide... no cesan, la catástrofe será inevitable".
La traicionera acogida de la política del FMI por parte del presidente peruano Alejandro Toledo, combinada con la creciente oleada de escándalos de corrupción al interior de su gobierno y su propia ineptitud personal, lo tienen sumido en un vergonzoso porcentaje de aprobación que, según la última encuesta, es apenas de 7,3%. Y, del 92% de la población disgustada con su gestión, más del 50% cree firmemente que no llegará al fin de su término oficial en 2006. La crisis es tan grande que el principal periódico de Perú, El Comercio, publicó un poco acostumbrado editorial de primera plana en su edición del 12 de febrero, con la advertencia de que la única forma en que el presidente Toledo termine su mandato de cinco años es cediéndole el poder a un nuevo primer ministro y a un gabinete más fuerte que excluya a miembros del partido político de Toledo. El editorial advierte que Perú se encuentra al borde del desplome, del cual no se salvará con un simple cambio de gabinete. Tras perder a cuatro miembros de su gabinete en los últimos tres meses, el Gobierno de Toledo enfrenta ahora otro escándalo de corrupción (el último forzó la renuncia del propio vicepresidente) que involucra al asesor de inteligencia más cercano del Presidente, César Almeyda, quien se vio obligado a renunciar. La oposición peruana es tanta ante la hipocresía del gobierno, que Toledo se vio obligado a salir en televisión nacional la medianoche del 7 de febrero para desvincularse de Almeyda, "denunciar" la corrupción y responsabilizar a la "mafia" de estar detrás de los ataques a su gobierno. Una semana después, el 16 de febrero, Toledo cambió de nuevo a su gabinete, y nombró como ministro de Finanzas al hombre de Wall Street, Pedro Pablo Kuczynski. Fue después de su patética aparición en televisión nacional que se publicó la sorprendente cifra de popularidad de su gobierno, misma que refleja otra realidad: "la historia exitosa" del FMI de Toledo, de que Perú era dizque la economía más estable y de mayor crecimiento en las Américas. Incluso el Washington Post del 4 de febrero lo admite: "Mucho del crecimiento económico vino del aumento de las importaciones en sectores como el minero y la industria controlada ampliamente por las empresas extranjeras, con sólo una pequeña porción de las ganancias para los peruanos. Ese asunto, entre otros, ha dificultado el venderle el libre comercio al público aquí y en la región andina". El ambiente de tensión e inestabilidad es tal, que el nuevo embajador peruano ante los EU, Eduardo Ferrero Costa, hizo una advertencia pública el 6 de febrero de que Perú "no es Bolivia", y que "sería inaceptable para la comunidad internacional" un golpe de Estado en Perú. |
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