El precandidato presidencial demócrata de los Estados Unidos, Lyndon H. LaRouche, concedió esta entrevista el 3 de marzo al programa de radio de la Juventud Larouchista en Argentina (MJL), El Poder de la Verdad. La entrevista causó un tremendo revuelo, lo que se reflejó en la gran cantidad de mensajes electrónicos que el MJL recibió de los radioescuchas durante y después del programa.
Pregunta: Buenas noches señor LaRouche. Lo saludamos del programa El Poder de la Verdad desde Buenos Aires, Argentina, y queremos decirle que es un gusto tenerlo con nosotros.
LaRouche: Voy a tratar de ofrecerle algo útil a Argentina.
Pregunta: Nos gustaría que nos comente qué es lo que está pasando en este momento con las elecciones en los Estados Unidos.
LaRouche: Esta es la situación. Quiero darles un informe que el presidente de Argentina [Néstor Kirchner] debe recibir. Si yo fuera el Gobierno en Washington, el embajador de Argentina estaría recibiendo este informe.
Hay varios asuntos que deben tomarse en cuenta juntos. Primero que nada, el mundo está ahora al borde de la crisis financiera más grande de la historia moderna. El derrumbe generalizado que hasta ahora se ha pospuesto utilizando métodos hiperinflacionarios. El ritmo de impresión de dinero nos recuerda la Alemania de 1923. Mucha gente cuerda alrededor del mundo sabe que este derrumbe se viene en cualquier momento.
A escala mundial, hay dos facciones principales a este respecto. A una Argentina ya la ha visto: la política de grupos financieros internacionales como los sinarquistas del período de 1922–1945. Estos financieros dicen que cuando la crisis sucede, los banqueros sacrifican a la gente. Lo que están demandado de Argentina hoy, lo demandarán de Brasil mañana, o quizás en unas semanas a partir de ahora, pero pronto. También piensan hacérselo al pueblo de los EU. Este es el único asunto real en la campaña presidencial estadounidense. No sólo hay una división entre los partidos Demócrata y Republicano, sino que dentro del propio Partido Demócrata hay una crisis grave.
Sólo quedan dos candidatos para la candidatura demócrata en este momento: el senador [John] Kerry y yo. Ningún otro candidato tiene importancia alguna en estos momentos, al menos no para la presidencia. Tal vez tengan una importancia secundaria, en cosas secundarias.
Ahora bien, el enemigo me teme y me odia. Me refiero a gente como Felix Rohatyn, asociado con Lazard Frères. Estos son fascistas, son fascistas en el sentido en que Lazard Frères fue fascista en Francia en el período de Hitler. Lazard Frères fue uno de los principales elementos sinarquistas en ese período. Ellos están empeñados en que, bajo ninguna circunstancia, yo llegue a ser presidente. Hay una pelea dentro del Partido Demócrata, entre aquellos que se oponen a los métodos schachtianos, esto es, a los métodos de Félix Rohatyn, y los que representan estas tendencias fascistas. Recientemente esta última facción es la que ha tenido éxito en minimizar el acceso que recibo a los órganos de difusión. Han ordenado que se destruya el voto que yo recibo.
Pregunta: Como sabemos, la situación económica financiera internacional está en colapso, y como sabemos estamos asistiendo a la caída de dicho sistema financiero. Lo que querríamos es que el señor LaRouche ilustrara a nuestra audiencia sobre, ¿cuál es su propuesta para sacar al mundo de esta catástrofe en la que estamos en ciernes?
LaRouche: Esta es la situación. Desde ayer, los únicos dos candidatos a próximo Presidente de los EU somos Kerry y yo. El que haya una solución o no va a depender de lo que pase entre Kerry y yo, y otras personas en ese círculo. Si yo no tengo éxito, no hay una oportunidad para el mundo, de ninguna parte. Esta es la crisis más peligrosa de la historia moderna.
El horror que Argentina está sufriendo es sólo un indicio de las cosas terribles que están a punto de suceder. Esto se reduce al problema de cuáles son las personalidades líderes; no de qué es lo que se va a hacer, sino de quién lo va a hacer. Por ejemplo, si Bush fuere reelegido, no hay una oportunidad para la civilización globalmente; y si Kerry y yo no llegamos a un acuerdo con otros sobre la solución correcta, entonces no pasará. Esa es la naturaleza práctica de la situación hoy día.
Hay mucha gente en Europa, en círculos destacados, que están de acuerdo con mi análisis del peligro, pero no hay gobierno en Europa que sea capaz de resolver esto. A menos que el Gobierno de los EU adopte las medidas correctas, no hay esperanza alguna para el mundo. Será la peor crisis de la historia moderna.
Tenemos que enfrentar la realidad de que estamos en un momento en el que los errores que se han cometido. . . en que todo el planeta podría hundirse en una edad oscura, en la que la población caerá con rapidez a mucho menos de mil millones de personas. Así que esa es una situación desesperada para toda la humanidad. Y el centro de la solución al problema es el Gobierno de los EU; y el centro de la solución en este instante está entre John Kerry y yo.
El problema es que Kerry es un buen hombre, pero no entiende de economía. Yo entiendo la situación internacional, entiendo de economía. Es ahí donde recae el problema.
Así que tenemos dos cosas que son necesarias. Necesitamos la iniciativa correcta que surja de los EU, y necesitamos una movilización internacional en cada país en torno a la misma idea, para que acordemos soluciones. Porque la humanidad está en juego. Este no es sólo un problema. El asunto es que la humanidad está en juego.
El problema es que hace 40 años los EU se transformaron, de ser el líder mundial en producción, a convertirse en un poder decadente posindustrial parasitario al estilo del Imperio Romano. Lo que vemos ahora son los efectos de ese cambio de dirección, de ser una sociedad moderna y progresista, a una sociedad decadente que se viene abajo más rápido que Roma, pero de una forma muy parecida.
Tomen el caso de Argentina en 1945, y de nuevo en 1982. Piensen en la posición del nivel de vida de los argentinos en el mundo en 1945 y en 1982, y ahora, hoy. Y entonces tienes una idea de hacia dónde se encamina el mundo. Y la humanidad de hecho tiene que unirse para demandar una solución. Tenemos que hacerle claro a la humanidad cuál es la solución.
Pregunta: Tenemos mucha gente que está escuchando en este momento este programa, y tal vez entre ellos esté escuchando el señor Presidente de la nación, el doctor Néstor Kirchner, o bien alguno de sus colaboradores. Entonces, le queremos pedir al señor LaRouche que diga qué le diría, o qué le recomendaría al presidente Kirchner que haga para enfrentar la situación en la que se encuentra en este momento nuestro país, Argentina.
LaRouche: Número uno, la verdad sobre la crisis internacional debe ser clara: que se trata de una crisis internacional, y no de una crisis de Argentina. Que Brasil enfrentará una crisis similar muy pronto, y que los EU están a punto de hundirse en una depresión muy honda. Lo más importante es crear una coalición de gente que entiende el problema y que entiende cuál es la solución requerida. Si yo fuese el Presidente de Argentina, primero quisiera que mi gente supiera cuál es el problema, cuál es el problema internacional, porque todos los problemas de Argentina tienen un origen internacional. Por tanto, la gente tiene que entender el problema internacional, tiene que tener un sentido de que, fuera de Argentina, hay gente que tiene el mismo conocimiento y la misma actitud.
Por último, debe entender que hay soluciones prácticas que su gobierno está preparado para adoptar. Quisiéramos que otros gobiernos, junto con Argentina, entendieran que el problema de Argentina también es su problema, y que es el problema de Europa. Y la gente debe entender la importancia de resolver este problema juntos. Así que esta idea de crear una unidad internacional en torno a líderes de gobiernos o líderes de pueblos, es la clave para darle a la gente el coraje de movilizarse, de pelear como debe hacerlo para salvar a la civilización.
El problema principal son los depredadores financieros, representados por los sinarquistas que nos dieron la Segunda Guerra Mundial. Esa gente, lo que trataba de hacer con Hitler, Mussolini y Franco, y con sus colaboradores en los EU y el Reino Unido, están tratando de hacerlo de nuevo, y sucede que no hay un Roosevelt en la presidencia; ese es nuestro problema. Lo que tendremos que hacer. . . el producto interno bruto mundial se calcula en los 41 billones de dólares, y tenemos ahora [400] billones de dólares de derivados financieros como deuda. ¡Esta deuda nunca podrá pagarse! Por tanto, los gobiernos tendrán que actuar para crear un nuevo sistema monetario monetario que condone mucho de esta deuda inútil.
Por ejemplo, toda la deuda de América Central y del Sur es, en efecto, fraudulenta. Los países no se endeudaron; la deuda fue impuesta sobre ellos. Si tenemos una unión entre naciones para condonar la deuda y reorganizarla, podemos proceder, como lo hiciera Franklin Roosevelt, creando nuevo crédito internacional barato a largo plazo para revivir la industria, la infraestructura y la agricultura, para elevar el ingreso y elevar el número de empleos. Bajo tales términos de colaboración podemos salirnos de este desastre.
Pero los banqueros dirán: "Sobre nuestros cadáveres". Y dirán: "De preferencia sobre sus cadáveres". Este es el problema. Si la gente dijera la verdad del problema, si nos uniéramos simplemente diciendo la verdad sobre la naturaleza del problema e indicando las lecciones de la experiencia que nos dicen cuál es la solución, entonces obtendríamos la fuerza política internacional para resolver el problema.
Esto significa que la gente ya no tiene que temerle a los EU, y eso requiere un cambio radical en el liderato político de los EU. Yo estoy tratando de educar a Kerry, quien es un hombre bueno. Pero soy yo el que está calificado para ser presidente, y no Kerry. Sin embargo, creo que de alguna manera juntos podemos arreglar algo. Esa es la situación. Hay mucho más, pero esa es la esencia del problema.
Pregunta: Señor LaRouche, quería hacerle una pregunta. ¿Por qué considera usted que Argentina es hoy la prueba tornasol para todos los candidatos presidenciales estadounidenses?
LaRouche: Porque Argentina tiene una historia especial, que mi amigo Jacques Cheminade de Francia que se crió en Argentina entendería. Si uno se remonta al tiempo en que el nivel de vida en Argentina era el cuarto más alto del mundo, [uno entiende por qué es que] Argentina fue el país que decidieron destruir primero. Y el problema relativo de Argentina es que la escogieron para destruirla. Esta decisión la tomó el viejo Nelson Rockefeller cuando trabajaba en el Gobierno de Roosevelt, durante la Segunda Guerra Mundial. Cierta facción angloamericana dijo: "Si destruyes a Argentina, puedes empezar a destruir toda Sudamérica". Y como saben, el ataque contra Argentina fue el más intenso en este período. Ese es el problema, y es el mismo problema que tienen otros pueblos.
Pregunta: Hoy en un diario local salió una nota sobre Samuel Huntington. Habló sobre su "nueva obra", que es Who We Are (Quiénes somos). Teniendo en cuenta que esta persona, esta "personita", fue la que habló del "choque de civilizaciones" y la construcción de un nuevo orden mundial. . . y posteriormente se dieron los sucesos del 11 de septiembre, ¿cree usted que esta nueva obra de Huntington es un antecedente para que hechos de la magnitud de [los del] 11 de septiembre se den, pero esta vez culpando a la población hispana?
LaRouche: Sí, él haría eso. Huntington de hecho es producto de una cierta facción de la inteligencia británica. Nominalmente él ha trabajado en la operación británica en el Oriente Medio. Es muy allegado a Zbigniew Brzezinski, y recientemente abordó el tema hispano. Hay un plan sinarquista y Huntington es un sinarquista, y la idea es crear un conflicto de intentar reclamar el Imperio Español de la época de la colonia, para España. Y la intención es usar esto para promover el terrorismo y otras clases de conflictos sangrientos por toda América Central y del Sur, y hacerle a Centro y Sudamérica lo que el "choque de civilizaciones" de Huntington hizo contra el mundo Islámico.
Pregunta: Bueno, lo que voy a leerte. . . es un mail que manda una oyente del programa: "¿Tiene pensado venir a la Argentina para asesorar, o al menos brindar una conferencia o charlas? Porque le resultaría muy interesante [a la gente] escucharlo con más tiempo.
LaRouche: Me gustaría hacerlo. Yo estuve en Argentina en 1984, y me gustaría ver el país de nuevo. Argentina es uno de los países con los que tengo una responsabilidad especial de defender. Esos países son México, Perú, Brasil y Argentina. Hay otras naciones, pero estas son las que constituyen mi principal responsabilidad.
Pregunta: Existe en la mente de mucha gente harto desinformada de aquí de Argentina, la idea aceptada de que hay una crisis en la Argentina, de que hay crisis en Iberoamérica, y de que hay una crisis muy grave en los EU. Pero estas personas entienden, erróneamente, que en Europa no existiría ninguna clase de crisis, dado que, como el euro tiene una paridad muy superior a la del dólar, consideran erróneamente que esa paridad mayor implicaría una moneda fuerte, que a su vez se correspondería con un éxito económico, un éxito industrial. Querríamos que el señor LaRouche le conteste a esas personas.
LaRouche: Europa está, de hecho, en bancarrota. Realmente no hay ninguna parte del sistema financiero trasatlántico que no esté en bancarrota. La única esperanza de crecimiento económico de Europa estriba en su colaboración con países tales como Rusia, China e India. Por ejemplo, Alemania es el centro de esto. Ellos son la gran operación de exportación de Europa. Francia también es muy importante en esto. La colaboración entre Francia y Alemania es muy importante. Entre los políticos italianos está la gente más moral de todos los políticos de Europa. Y en el norte de Italia es donde ha habido una significativa actividad de exportación de la pequeña industria; pero en su mayoría Italia es un desastre. El estado de la economía interna alemana es un desastre.
La única razón por la cual el euro parece subir en tanto el dólar se hunde, es que el euro está derrumbándose con menor rapidez que el dólar.
Uno de los problemas en Argentina es que la gente subestima la gravedad de la crisis estadounidense. Sin el apoyo de China y Japón, los EU se hubieran hundido hace tiempo. Miren el aumento de los precios de los productos de consumo en los EU, el derrumbe del empleo, el gran número de desempleados que no se cuentan. Los EU están en un proceso que amenaza con la desintegración. Europa también está en ese proceso, pero siendo los EU un país destacado, se desintegran a mayor velocidad.
Pregunta: Lamentablemente tenemos que dar por finalizada esta entrevista. Y lo lamentamos muchísimo porque, obviamente, da para hablar con el señor Lyndon LaRouche muchas horas más. El deseo del MJL de Argentina es tenerlo en muy poco tiempo en nuestro país, y que esperamos contar con su colaboración en algún otra emisión de nuestro programa de radio El Poder de la Verdad. Sí, señor LaRouche, fue un honor realmente haber entrevistado hoy en nuestro programa a la única persona que sabe cómo sacar al mundo adelante.
LaRouche: Muy bien. Yo también envío mis mejores deseos, y gracias por invitarme.