Economía


Bush amenaza con no pagar la deuda de EU

El presidente George W. Bush hizo oficial lo que esta publicación y su editor fundador, Lyndon H. LaRouche, han venido diciendo desde hace algún tiempo: su Gobierno pretende no pagar lo que le debe al fondo del Seguro Social y a otros acreedores, incluyendo a los gobiernos e inversionistas extranjeros tenedores de bonos del Tesoro de Estados Unidos. Bush visitó las oficinas de la agencia federal de Deuda Pública en Parkersburg, Virginia Occidental el 5 de abril, y dijo que los bonos del Tesoro que tiene en caja el fondo del Seguro Social no son otra cosa que papel sin valor en un archivero. Bush, en efecto, declaró que no tiene ninguna intención de pagar los mil seiscientos billones de dólares que le pidió prestado al Seguro Social para financiar la guerra contra Iraq y el recorte impositivo que le concedió a estamentos más ricos del país, empréstitos que avaló con bonos del Tesoro. En la opinión de LaRouche, la declaración de Bush es otra prueba más de que el actual sistema financiero de tipos de cambio flotantes se acabó, y que no hay forma de revivirlo, y lo único que ha logrado Bush es acelerar su desintegración y hacer cundir el pánico.

“¿Realmente cree el Presidente que EU pudiera incumplir con esos bonos, los que fueron comprados con los duramente ganados dólares de los impuestos de millones de estadounidenses? Eso fue lo que le preguntó Charles Rangel, miembro demócrata por Nueva York de la Cámara de Representantes del Congreso de EU, en una carta el 13 de abril al secretario del Tesoro de EU, John Snow. “¿Avala el Presidente la política de que bajo cualquier circunstancia no se pagaría la deuda, lo que obligaría a millones de asegurados a sufrir un recorte en sus prestaciones en vez de recibir todo lo que ganaron durante sus años hábiles? ¿Cómo puede el secretario del Tesoro convencer a otros posibles compradores de nuestra deuda de que el Presiente no repudiará esos bonos también?”

Rangel también le preguntó a Snow si, cuando Bush dijo que será díficil pagar los bonos en manos del Seguro Social, eso también se aplica los otros 4,3 billones de dólares de deuda pendiente. “¿Son la obligaciones con los estadounidenses que esperan recibir sus plenas prestaciones del Seguro Social distintas a las de otros tenedores de nuestros bonos, tales como las entidades extranjeras que han comprado el 91% de la deuda pública incurrida desde que este Gobierno asumió el poder?

“Lo exhorto a que aclare si estos bonos son reales y si EU pretende pagarlos. De ser así, los estadounidenses podrán sentirse confiados de que el Seguro Social podrá pagar todas sus prestaciones por casi 50 años, al saber que pueden redimir los bonos que los trabajadores han comprado a lo largo de los años con sus cuotas al Seguro Social”, dijo.

El senador Harry Reid, jefe de la bancada demócrata en el Senado de EU, también criticó la gracia de Bush en Parkersburg. “El que él vaya a Virginia Occidental y pregunte, ‘¿Tienen algún valor estos pagarés?’ Está hablando del crédito de Estados Unidos de América. Bonos de ahorro. El 40% de éstos ahora los compran otros países, y él dice que va a incumplir con estos préstamos. Si esto sucede, yo no puedo ni imaginarme lo que le pasará al mundo y a nuestro país”, dijo Reid el 12 de abril.

Aun más contundente fue el New York Times, el diario de referencia de EU, que, en su editorial del 7 de abril, de nuevo “tomó prestado de Lyndon LaRouche”, como hace poco lo describió una cadena de televisión de EU.

“Imagínese esto: en su próximo viaje a Japón el presidente Bush visita las arcas del Banco del Japón, donde están depositados los 712 mil billones en bonos del Gobierno de EU en manos de ese país. Ahí, mientras ruedan las cámaras, Bush anuncia que esos bonos, respaldados por la plena fe y crédito de EU, en verdad no son sino vales sin valor. Hace lo mismo en China, y así por el estilo por todo el mundo, hasta que personalmente repudia la totalidad de los 2 billones de dólares en deuda estadounidense en manos extranjeras.

“El señor Bush ensayó precisamente ese número el jueves, cuando visitó las oficinas de la agencia federal de Deuda Pública en Parkersburg, Virginia Occidental. Posó al lado del archivero que contiene los 1,7 billones de dólares en valores del Tesoro que constituyen el fondo fiduciario del Seguro Social, y espetó un comentario al efecto de que esos bonos no eran ‘activos reales’. Más tarde, en un discurso que pronunció en una universidad cercana, dijo: ‘No hay ningún fondo fiduciario. Sólo hay unos vales, que yo vi de primera mano’ ”.

El Times señala que si Bush pone en duda la plena fe y el crédito de EU respecto a los bonos del Seguro Social, nadie querrá prestarle nada a EU, país que más que cualquier otro vive de pedir prestado