Ahora es cuando

"Tenemos la oportunidad de ganar esta guerra. Tenemos la oportunidad de darle marcha atrás a las horribles tendencias de los últimos 30 y tantos años". Así dijo Lyndon LaRouche el 20 de abril, lo que le infundió optimismo al centenar de ingenieros, técnicos y sindicalistas petroleros, retirados y otros que escucharon su alocución telefónica en la sede de PETROPERÚ en Lima. La conferencia, coauspiciada por FENPETROL y otras federaciones y sindicatos junto con Solidaridad de las Américas, fue sobre "Cómo revertir la crisis financiera y las privatazaciones de Perú y el mundo", y tuvo como marco el ensayo de LaRouche: "Los próximos cincuenta años de la Tierra".

LaRouche le dijo a los peruanos que "la posibilidad de un cambio no es algo muy remoto". Explicó que el derrumbe financiero internacional en marcha, los escollos con los que ha topado George W. Bush para lograr que el Senado ratifique a John Bolton ("el hombre que amaga con satisfacer a todas las putas de La Habana") como embajador ante la ONU, y las dificultades que ha tenido con su plan de privatizar el Seguro Social, muestran que "el Gobierno de Bush no es una entidad sólida. Es una entidad tiránica, pero no es una entidad sólida. Tiene muchas debilidades y podría caer en cualquier momento; todo el sistema".

La crisis, "especialmente con el derrumbe en marcha de la industria automotriz en torno a la General Motors y la Ford, significa que está forzándose un cambio. La burbuja de bienes raíces de los Estados Unidos está por estallar. Tenemos un déficit en la cuenta corriente, la deuda fiscal de los EU empeora. Tenemos la incompetencia manifiesta del Gobierno de Bush. Todas estas cosas se están juntando. Estamos a punto de una crisis, de un cambio significativo súbito en los EU".

Incluso, pueda que miembros del gobernante Partido Republicano de los EU empiecen a colaborar de forma bipartidista.

"Y ese cambio en la política hace factible el tipo de cambios que queremos en otros países, y en la cooperación internacional", en especial ahora que el Parlamento italiano aprobó una resolución histórica a favor de la propuesta de LaRouche de establecer una nueva arquitectura financiera, y que los mandatarios de Brasil, Colombia y Venezuela sostuvieron una reunión cumbre con el presidente del Gobierno de España para pactar la colaboración en torno a la integración física del subcontinente, y el Presidente de Argentina ha declarado, como antes había dicho LaRouche, que sí "hay vida después del FMI".

El momento no debe desperdiciarse. Además del Perú, en Colombia también hubo conferencias en torno a la inminente caída del dólar y la perspectiva de LaRouche sobre los próximos 50 años, el 21 de abril en dos universidades y con organizaciones sindicales. En los próximos días y semanas tendrán lugar conferencias similares en Monterrey, Celaya, Hermosillo, Ciudad Obregón, Saltillo y la Ciudad de México, además de una el 9 de mayo en la Universidad de Comahue, en Neuquén, Argentina.

Ésta es una guerra que podemos ganar. Hagámoslo.